Capítulo 4

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Con todo lo que había pasado la noche anterior olvidó que tenía una entrevista esa tarde. Miles Kane no era ningún desconocido para ella, ya varias veces lo había entrevistado y lo había ido a ver a algunas de sus presentaciones.

— Lo siento, Miles— dijo ella entrando a su oficina, el cantante estaba sentado en la silla de Lyla mientras leía el periódico y tomaba una taza de café

— No te preocupes, ya contesté varias de tus llamadas del día— dijo Miles y le extendió un papel con varios nombres y teléfonos apuntados

— Eres mejor que mi asistente ¡Tienes el puesto!— bromeó Lyla viendo aquel papel

— El sueño de mi vida, ser asistente de redacción— Miles se levantó de la silla para saludar a la reportera — ¿Ahora qué tienes?— preguntó mientras la abrazaba

— Nada— dijo ella separándose abruptamente

El cantante la observó con detenimiento y luego negó –Tú tienes algo, te conozco— dijo él y luego se sentó en la silla enfrente del escritorio de Lyla

— ¿Pues te acuerdas de mi novio?— preguntó ella y se sentó frente a él

— Loki— respondió con una gran sonrisa, y es que él también era fan de la película

— Pues ya no es mi novio, ahora somos "amigos"— dijo Lyla, se sorprendió de la frialdad con la que habían salido esas palabras de su boca, Miles se quedó igual de sorprendido

— Supongo que eso pasó hace tiempo— logró decir

— Ayer en la noche— respondió Lyla girando su silla para prender su computadora

— ¡¿Ayer?!— preguntó aún más sorprendido, Lyla asintió –No estás bien— aseguró él

— Estoy bien— dijo ella tratando de fingir una sonrisa

— No hay nada peor que una sonrisa así de fingida— aseguró Kane, pero Lyla no quitó la expresión de su rostro –Quizás estás en negación—

— Pues si la negación es la que me permite trabajar tendré esa actitud— respondió Lyla y él sólo negó

— No lo hagas, lo mejor es sacar lo que traes. Te lo digo por experiencia— dijo él y tomó la mano de la chica

— Lo haré cuando tenga tiempo— respondió ella, Miles puso los ojos en blanco, su amiga era tan testaruda. Platicaron un momento más y luego comenzó con la entrevista que duró muy poco, ya que todo el tiempo lo habían gastado divagando sobre sus vidas personales.

Estuvo platicando con Miles Kane al menos dos horas y logró sentirse bien, cuando él se fue volvió a sentirse sola, y lo peor es que su amiga Clara no estaba con ella para darle unas palabras de ánimo, la chica estaba cubriendo un festival es España y tardaría en regresar al menos dos semanas más, Lyla no sabía qué haría todo ese tiempo ella sola.

Tocaron a la puerta de su oficina y ella dio la indicación para que entrara

— Nate ¡usaste la puerta!— dijo Lyla fingiendo sorpresa

— Te enojas si no lo hago— replicó él –Vine para decirte que ya tenemos acceso a la información correspondiente a Tom, su agente habló para avisarnos, o sea que ya podemos publicar notas de él y sus trabajos, ir a las grabaciones de sus películas y todas esas cosas ¡Genial! ¿Qué le dijiste?— preguntó animado Nate sentándose frente a Lyla

— Sólo le dije que este acuerdo estaba afectando mi trabajo, y estuvo de acuerdo en revocarlo— explicó ella seria

— ¡Genial! Pero, ¿se enojó, te dijo algo más?— se preocupó Nate

Lyla suspiró antes de continuar –Me pidió un tiempo— dijo finalmente

— ¿Por qué?— parecía enojado más que sorprendido

— No lo sé, dijo que fue por todo: Lo de la alfombra roja, lo de los eventos, el hecho de que ya no confía en mí...— respondió y no pudo evitar ponerse a llorar, aquello estaba mal, pero ya no tenía las fuerzas para hacerse la dura

— Lo siento, Lyla... No sé qué decir— se acercó Nate a ella para sólo tomar su mano

— Está bien— respondió secándose las lágrimas –Al menos ya no nos perderemos las exclusivas— dijo ella, y Nate asintió no muy convencido

— ¿Estás bien? Si quieres puedes irte ya— le sugirió pero Lyla se negó

— Si tienes alguna otra cosa importante en la noche yo puedo cubrirlo— se ofreció la chica

— Buscaré algo— dijo Nate y luego salió de la oficina de la reportera, cerró la puerta y luego se dirigió a la asistente de ella –Que nadie moleste a Lyla, si tiene alguna llamada pásala a mi oficina— pidió a la chica, no espero respuesta de ella, sólo caminó de nuevo a su oficina

Tom decidió marcar a la oficina de Lyla, cuando él se despertó la chica ya se había ido, quería agradecerle por haber dejado que se quedara esa noche ahí. Sabía que no contestaría el celular, por lo que se comunicó a su oficina, le contestó una chica, él preguntó por Lyla y la chica no respondió

— ¿Bueno?— preguntó Tom pensando que quizás se había cortado la llamada

— ¿Quién le digo que le llama?— preguntó la chica

— Tom... Hiddleston— aclaró él y se tuvo que quedar un rato en la línea hasta que por fin fue enlazado

— ¿Tom?— preguntó una voz masculina al otro lado del teléfono

— Sí, ¿quién habla?— quizás se habían equivocado de extensión

— Nate, disculpa que Lyla no te pueda contestar, no se sentía bien— trató de explicar y que su tono sonara amable

— ¿Está bien?— preguntó preocupado

— Claro, sólo necesitaba desconectarse un momento. ¿Quieres que le diga algo?— Nate en serio trataba de sonar amable pero no podía hacerlo

— No, le marco al rato. Gracias, Nate— dijo Tom, no espero que éste se despidiera y colgó el teléfono

Se comenzaba a sentir celoso de Nate, le ponía demasiada atención a Lyla, estaba dispuesto a marcar al celular de Lyla, pero se detuvo antes de apretar el botón de llamada

— ¡Basta, Tom! Ella ya no es tu novia— se regañó. Luego de reconsiderarlo un minuto decidió que esperaría a que llegara a casa, así podría agradecerle en persona en lo que decidía qué haría después.

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El capítulo está algo corto pero espero les haya gustado.

¿A ustedes les gusta Miles Kane?

My Mistakes Were Made For YouDonde viven las historias. Descúbrelo ahora