★𝑰 𝑾𝒂𝒏𝒏𝒂 𝒃𝒆 𝒚𝒐𝒖𝒓𝒔★

★!Capitulo 4!★

Había pasado una semana después de aquella información, los canes estaban felices especialmente el bulldog por aquella invitación a un hotel de lujo, en esa misma semana, no hubo ninguna misión o algo por el estilo, por lo que Ryder accedió. Los canes se estaban preparándose para irse a la mañana siguiente, porque el hotel quedaba lejos. Lo que no saben, es que en ese mismo mes, pasarán muchísimas "cosas inesperadas"....

Todos preparaban sus cosas y planes que van hacer cuando estén por allá, también, preparaban comida para el viaje hacia el hotel, a decir verdad, el hotel no queda cerca. Entre todos, se repartieron el trabajo, o pusieron algo para llevar, Zuma llevaba varías cosas de piscina y playa junto con tablas de surf, Skye y Marshall se encargaban de la comida, Rocky y Chase se encargaban de verificar que todo estuviera en orden, y Rubble.... Como siempre se encarga de verificar la comida, y Marshall agregó en caso de emergencia, un botiquín de primeros auxilios.

—Al fin, vacaciones que duran más de una semana, y esta vez con Everest! la última vez que tuvimos vacaciones fue hace 2 años—habló—ya necesitábamos un respiro, más con esa gallina.—habló la cocker—por que la alcaldesa no le pone una correa? Se mete en todos lo problemas posibles.—contestó.

—No lo sé Skye, también quisiera que le pusieran una correa, no deja de meterse en problemas.—respondió el albino.—En una semana tuve que ayudarla 25 veces por subirse en un simple árbol.—añadió para que la cocker se empezara a reírse a carcajadas.

—Espera, Espera..¿Tuviste que bajarla de un simple árbol? en primer lugar,¿Como se subió? Y en segunda, ¿Porque diablos lo hizo?—preguntó.

—Contestando a la primera pregunta, Si, Así es. Realmente no sé cómo se pudo subir, y lo hizo por otra gallina que se subió al árbol.—Contestó.—y yo dudaba si esto era real, o un simple sueño.—añadió para después seguir preparando la comida con Skye, después de un rato llegó Rubble a "verificar" la comida.

—Esto está.... !!Perfecto!!—hablo el bulldog entusiasmado.

—Nos alegra que te haya gustado, Rubble—contestó el albino.

—¿Ya está la comida? Si es así, vámonos, Zuma ya está listo. Recojan y vámonos a nuestras vacaciones!—avisó el alemán.

Después de un rato los canes estaban listos para irse a sus relajantes vacaciones, ya solo faltaba contar para ver si ya estaban todos. La última vez que fueron a un lugar, sé olvidaron de Rubble.

—Solo falta Zuma.—habló el mixto.

—Aquí llegue maricas.—respondió el contrario.

—Y ahí llegó; el pendejo gay sábelo todo.—habló él mixto—siéntate que nos vamos sin ti.—añadió.

—Ora, que marica, ni que fuera tu sirvien— el contrario fue interrumpido al caerse debido al arranque del Paw Patroller.—Avisen primero ¿no?— añadió.

—Te lo dije y no me hiciste caso idiota. Ahora siéntate que sí arrancan y frenan, valiste madre.

—Soy TÚ idiota.

—Tranquilos, no queremos tensión en él aire, además de que este será un viaje largo.—contestó el humano.

Ya habían pasado unas tres horas, y los canes estaban jugando videojuegos en una nintendo switch, escuchando música, dialogando entre sí, etc. Los canes se estaban quedando ya dormidos, mientras que Ryder miraba con atención, y recordando cuando eran solamente unos pequeños cachorros. Ya de noche, todos despiertos y con energía, empezaron a charlar para matar el tiempo.

—¿Cuánto faltaaaa?¿A que hora legaremos? Este viaje es largo....—se quejó el pequeño bulldog.—Tengo hambre—añadió.

—Rubble.... Por décima vez, llegaremos en la mañana o un poco más tarde.... ¿No te cansas de preguntar lo mismo?—contestó el mixto un poco molesto por el bulldog no paraba de preguntar a qué hora llegarían.