Amor pero al revés

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"Oye Hwa, nena, ¿qué quieres para tu regalo de empuje?" Preguntó Hongjoong, de la nada y casi haciendo que Seonghwa se atragantara con su cena. Hongjoong pareció preocupado durante unos segundos mientras Seonghwa tosía, tratando dolorosamente de desalojar la comida atascada en su garganta.

"Lo siento, ¿qué coño es un regalo de empuje?" Dijo Seonghwa, tosiendo y limpiándose la boca con una servilleta. Hongjoong inclinó la cabeza hacia un lado y lo miró fijamente durante unos segundos antes de darse cuenta de que iba a tener que explicar.

"¡Ya sabes, un regalo de empuje! Cuando tengas al bebé, te compro un regalo como agradecimiento por, ya sabes, sacar al bebé". Hongjoong explicó, bastante torpe en opinión de Seonghwa, su rostro se volvió de un tono rosado claro. "¿Tu Appa no compró tu Eomma?" Parecía un poco nervioso mientras Seonghwa se sentaba allí en silencio.

"Te puedo asegurar, Hongjoong, que mi Appa podría haberle comprado algunas flores a Eomma, pero seguro que no fue todo un calvario como el que estás describiendo." Dijo. "¿Qué suele recibir la gente por un regalo de empujón?" Hongjoong pensó por un segundo.

"Mi Appa le regaló a Eomma un collar de diamantes por tenerme. Sé que uno de nuestros socios comerciales le regaló a su esposo un reloj para el primero y un automóvil para el segundo y el tercero, eran gemelos". Dijo Hongjoong, riéndose entre dientes cuando la boca de Seonghwa se abrió. —¿No es lo que esperabas? Se aclaró la garganta y se movió con la mano debajo del estómago.

"Joong, ¿recuerdas cuando te dije que no sabías cocinar era una mierda de gente rica? Esta es otra de esas veces". Dijo Seonghwa, haciendo que el alfa soltara otra carcajada. "No necesito un regalo de empujón ni nada por el estilo. Realmente no conduzco y apenas uso las joyas de lujo que ya me compraste. Simplemente no me compres uno". Hongjoong negó con la cabeza.

"Lamento informarte de esto, cariño, pero si no te compro un regalo de empuje, alguien va a empezar a correr el rumor de que nos divorciaremos y Eomma me matará. Le gustas demasiado como para dejar que te pierda. Dijo Hongjoong, sonriendo ante el ceño fruncido en el rostro de Seonghwa. Se levantó de la mesa y llevó los platos a la cocina. Seonghwa se levantó lentamente y lo siguió, mucho más lento de lo que podría haberlo hecho antes con los pies tan hinchados.

"Ni siquiera estamos casados". Dijo Seonghwa y Hongjoong lo miró a través de su flequillo. Dejó los platos sobre el mostrador y se llevó las manos a las caderas.

"Sabes a lo que me refería. Vamos Hwa, ¿qué es lo que quieres? ¡Puede ser cualquier cosa!" Dijo y Seonghwa suspiró, cargando sus platos usados en el lavavajillas, aunque agacharse se estaba volviendo más difícil a medida que crecía. Hongjoong pareció darse cuenta de eso y se acercó para pararse detrás de él.

"¡No quiero nada! Me has dado más de lo que podría pedir". Dijo, suspirando cuando sintió que Hongjoong le ponía las manos en la cintura, envolviéndolo con los brazos mientras se enderezaba. "Joong, vamos." El alfa apretó los labios contra su hombro.

"Puede ser cualquier cosa. Lo que quieras, solo di lo que es". Dijo, con un tono burlón en su voz y Seonghwa puso los ojos en blanco. Estaba un poco molesto con la forma en que Hongjoong estaba presionando para que se hiciera este regalo de empuje cuando técnicamente se suponía que era algo que se hacía por él.

"¿Por qué no le das algo al bebé y lo llamamos mi regalo de empuje?" Dijo Seonghwa, quitándose las manos del estómago y agachándose para cerrar el lavavajillas. Se volvió para ver a Hongjoong luciendo un poco abatido, como un cachorro pateado.

"Sí, eh, suena bien". —dijo, aclarándose la garganta y mirando al suelo, raspando el pie contra las baldosas—. Seonghwa se giró y acunó el rostro de Hongjoong entre sus manos.

"Quiero que le compres algo al bebé. Tengo todo lo que podría necesitar". Dijo Seonghwa y Hongjoong asintió, girando su rostro para besar la palma de Seonghwa.

"Está bien, es algo para el bebé".