capitulo 3: un entrenamiento y una tragedia

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Bueno aquí les traigo el siguiente capítulo de esta historia espero que les guste y comentén para seguir adelante con esta historia.

Se podía ver a Tanjiro arreglándose para ir con su padre ya que esa noche se lo iba a llevar.

Pero en eso entra Sumiko con una canasta de comida.

Tanjiro: hola buenas tardes hermana.

Sumiko: Hola hermano buenas tardes como estás?.

Tanjiro: bien gracias y tú cómo estás?.

Sumiko: bien gracias , te prepare esto para ti y papá.

Tanjiro: gracias hermana.

Sumiko: de nada.

Tanjiro: bueno ya me voy deséame suerte.

Sumiko: si , solo tengan cuidado ustedes dos.

Tanjiro: esta bien.

Así este tomo lo que necesitaba y también tomo la canasta de comida que su hermana hizo para el y para su padre.

Pero antes de irse este se despidió de ella dándole un beso en su mejilla y después se fue.

Y déjando a su hermana toda sonrojada por lo que hizo su hermano.

Sumiko: gracias hermano.

En otro lugar se ve a Kie curando las heridas que tenían sus dos hijas después de ese combate.

Kie: se sienten bien Taiko, Nesuko.

Taiko: si mamá no te preocupes estamos bien.

Nesuko: si estamos bien.

Kie: está bien pero me sorprende que Tanjiro las haya derrotado a ustedes dos solo con un movimiento.

Taiko: mamá te puedo preguntar algo?

Kie: si dime hija?

Taiko: cuando estába en el suelo después del combate de yo con mi hermana Nesuko contra mi hermano Tanjiro escuché a papá que puede ver algo que solo el puede ver.

Kie: disculpa hija pero yo no sé nada tu padre tiene muchos secretos que es mejor no saberlos.

Taiko: está bien gracias.

Kie: bueno las dejo ya que tengo que ver dónde siento tu hermano.

Taiko: está bien.

Después de que Taiko digiera eso Kie se fué de la habitación dejando sola a Taiko y a Nesuko.

Nesuko: y bien que haremos ahora.

Taiko: paciencia hermana solo hay que practicar más duro para que podamos derrotar a Tanjiro .

Ésto lo dijo con un tono de envidia y enojo ya que como su hermano que no podía hacer su danza ceremonial tenía esa maestría con la katana.

Ésto también se lo preguntaba Nesuko quien sin darse cuenta crecía dentro de ella un sentimiento de enojo y de envidia.

Ya en la noche Tanjiro y Tanjuro caminaban por la nieve y Tanjiro se preguntaba hasta donde iban a ir y que van a hacer.

Tanjiro: papá ya llegamos.

Tanjuro: falta poco hijo.

Así éstos siguieron hasta que se detuvieron un minuto.

Tanjuro: Tanjiro dime hijo que mirás en ese venado que esta por ahí.

Tanjiro: ese venado tiene tres costillas rotas va a morir pronto.

Tanjuro: lo sabía tu también puedes ver lo que yo puedo ver.

El Renacer Del Hechicero Supremo Donde viven las historias. Descúbrelo ahora