Naruto - Un Viaje Hacia La Oscuridad ✔️

45 - La Confrontación de los Pecados Pasados

El puño derecho de Baku no se acercó ni un metro al hombre de pelo rojo. Se detuvo en el aire, como si una especie de fuerza repulsiva lo retuviera firmemente.

Los ojos de anillos púrpura le devolvieron la mirada, mirando directamente dentro de su propia alma, mientras en el rostro del hombre aparecía el minúsculo comienzo de una sonrisa burlona. "¿Tú también te has convertido en un arma, Naruto?", preguntó con cuidado, con una pizca de tristeza acechando en su tono. "¿Has perdido tu camino?"

"¿Cómo? balbuceó Naruto. "¿Cómo me conoces?"

"Lo sé todo", susurró Nagato. De repente, sacudió la mano derecha hacia un lado y, como si espantara una mosca, golpeó a Yamato -que le había estado flanqueando- contra el suelo desde lejos. "Porque yo soy Dios".

"Entonces eres un Dios de mierda", gruñó Naruto. "Por todo lo que dejaste que ocurriera".

Nagato ladeó la cabeza y asintió lentamente. "Sí, lo soy", sonrió. "Pero a través del Dolor... llega el crecimiento. A través del Dolor, llega la verdad. A través del Dolor, llega la realización. La iluminación sólo puede llegar apretando los propios dientes y luchando hacia delante, sin traicionar nunca los propios ideales."

Naruto resopló mientras saltaba hacia atrás y preparaba su Yoroi Toshi para luchar. "Ah, sí", asintió Nagato. "Esa espada ha sentido la sangre de los inocentes en ella", mantuvo la sonrisa -¡era desconcertante!

"¿Qué se siente?" preguntó Nagato con suavidad. "No tienes por qué seguir haciendo esto, Naruto", dijo el pelirrojo, con tono condescendiente. "Ya puedes dejar de sufrir, puedes dejar de luchar... Yo cuidaré de ti. ¿No quieres estar con tu familia?".

"¡No te conozco!" ladró Naruto.

"Pero yo sí te conozco", sonrió Nagato. "Nacido el diez de octubre, de Uzumaki Kushina y Minato Namikaze, el Kyuubi Jinchuuriki y el Yondaime Hokage, te graduaste casi en último lugar y te convertiste en miembro del equipo trece. Tus compañeras de equipo son Haruno Sakura y Sai Satou, aprendiste bajo Aoba Yamashiro y Danzo Shimura", habló en voz baja. "Tu primera afinidad es el Viento, pero el Fuego es algo que te sale de forma natural".

Naruto palideció. La... la última parte significaba que les había estado observando desde que habían levantado el campamento, y la primera... la primera significaba que o tenía espías en la aldea, o alguien le había contado todo aquello.

"Naruto, no he venido a luchar, hoy no", Nagato negó con la cabeza. "He venido... a decirte la verdad", mientras hablaba, unos zarcillos de madera surgieron del suelo para intentar atrapar al encapotado. Los tentáculos de madera se hicieron añicos en cuanto intentaron tocar al Uzumaki, que entrecerró sus ojos concéntricos en Yamato. "Tu insistencia me enferma", levantó la mano izquierda y luego la apretó: "Duerme".

El cuerpo de Yamato cayó al suelo como si un gran peso se hubiera posado sobre sus hombros, y pronto el suelo crujió bajo la presión mientras el hombre gritaba de dolor.

"La verdad", habló Nagato a continuación, mirando a Naruto. "La verdad sobre Uzushio", dio un paso adelante. "La razón por la que los Uzumaki lo perdimos todo. La razón por la que nos vimos obligados a escapar, a dejar atrás nuestra herencia, nuestro pasado, nuestros conocimientos... cazados como animales de caza, secuestrados y llevados lejos".

Naruto tragó saliva mientras apretaba con cuidado su Tanto. "¿Por qué debería creerte?"

"Podría matarte allí donde estás", dijo el hombre. "Pero no lo haré, porque digo la verdad. Un Dios no necesita mentir", señaló. "No cuando la verdad es mucho peor".

Naruto resopló. "¿Y cuál es tu verdad entonces? Oigo muchas", puso los ojos en blanco. "Tienes la misma capa que Itachi y Tobi... ¿la misma organización?".