Tsukishima pasó los siguientes días sumido en una intensa reflexión. Sabía que debía tomar una decisión pronto, y cada pensamiento lo llevaba de vuelta a Yamaguchi. Finalmente, una tarde, mientras miraba por la ventana de su apartamento, sintió que la claridad lo inundaba.
Tsukishima: "Ya sé lo que tengo que hacer."
Tomó su teléfono y llamó a Yamaguchi. "Necesitamos hablar. ¿Puedes venir a mi casa esta noche?"
Yamaguchi notó la urgencia en la voz de Tsukishima y aceptó de inmediato. "Claro, Tsukki. Estaré allí en una hora."
Cuando Yamaguchi llegó, Tsukishima lo estaba esperando en la sala, visiblemente nervioso pero decidido. Invitó a Yamaguchi a sentarse y comenzó a hablar sin rodeos.
Tsukishima: "Yamaguchi, he estado pensando mucho en todo esto. La oferta en Corea es increíble, y quiero aceptarla, pero solo si tú vienes conmigo."
Yamaguchi parpadeó, sorprendido por la declaración directa. "¿Ir contigo a Corea? Tsukki, eso es... enorme. ¿Estás seguro de que eso es lo que quieres?"
Tsukishima asintió con firmeza. "Sí, estoy seguro. No quiero hacer esto sin ti. Eres una parte esencial de mi vida, y no puedo imaginar seguir adelante sin ti a mi lado. Sé que esto significa un gran cambio para ambos, pero estoy dispuesto a hacer todo lo que sea necesario para que funcione."
Yamaguchi: "Pero, Tsukki, mi trabajo, mi vida aquí... ¿cómo voy a dejar todo eso atrás?"
Tsukishima tomó las manos de Yamaguchi, mirándolo a los ojos con una intensidad que reflejaba su determinación. "Podemos encontrar una solución juntos. Te ayudaré a conseguir un trabajo en Corea, un lugar donde puedas seguir creciendo profesionalmente. Tendremos un hogar juntos, construiremos una vida nueva. Prometo que haré todo lo que esté en mi poder para que no te falte nada."
Yamaguchi sintió que su corazón latía con fuerza. La propuesta de Tsukishima era tentadora, pero también estaba llena de incertidumbre. "Tsukki, esto es... mucho. No sé si puedo dejar todo atrás así de fácil."
"Lo sé," respondió Tsukishima suavemente. "Pero sé que podemos hacerlo. Hemos superado tantos obstáculos juntos, y este es solo uno más. Quiero que estemos juntos, sin importar dónde estemos. Porque te amo, Yamaguchi, y no quiero perderte."
Yamaguchi sintió que sus ojos se llenaban de lágrimas ante la sinceridad y la intensidad de las palabras de Tsukishima. "Pero tengo miedo de que las cosas no funcionen, de que podamos perder lo que tenemos."
Tsukishima negó con la cabeza, apretando suavemente las manos de Yamaguchi. "No lo perderemos. Confío en nosotros, en nuestro amor. Sé que puede ser aterrador, pero también sé que vale la pena intentarlo. Por favor, Yamaguchi, ven conmigo a Corea. Hagamos esto juntos."
---
La noche avanzó mientras seguían hablando, compartiendo miedos, esperanzas y sueños. Tsukishima dejó claro que estaba dispuesto a hacer cualquier sacrificio necesario para estar con Yamaguchi, y su determinación comenzó a calar en Yamaguchi.
Yamaguchi: "Tsukki, esto es una locura... pero si tú crees que podemos hacerlo, entonces quiero intentarlo. Quiero estar contigo, sin importar dónde estemos."
La sonrisa de Tsukishima se iluminó, y sus ojos reflejaron un alivio y una alegría profundos. "Gracias, Yamaguchi. Sé que esto no será fácil, pero juntos, sé que podemos hacerlo."
Se quedaron en el apartamento de Tsukishima esa noche, hablando hasta la madrugada, haciendo planes y soñando con su futuro juntos. Aunque la incertidumbre seguía presente, el amor y la determinación que compartían les daba la fuerza para enfrentar cualquier desafío.
Tsukishima: "Vamos a hacerlo, Yamaguchi. Vamos a Corea y construiremos una vida juntos. No importa lo que pase, siempre estaremos juntos."
Yamaguchi asintió, su corazón lleno de esperanza y amor. "Sí, Tsukki. Vamos a hacerlo. Juntos."
Mientras la noche avanzaba, la conversación se fue calmando, dando paso a un silencio cómodo y cargado de sentimientos. Tsukishima, sintiendo la importancia del momento, apretó las manos de Yamaguchi con más fuerza, mirándolo profundamente a los ojos.
Tsukishima: "Todo va a estar bien, Yamaguchi. Confía en mí."
Yamaguchi, con una sonrisa serena, respondió: "Lo sé, Tsukki. Siempre estaré contigo."
Fue en ese momento, en medio de la calma y la promesa compartida, que Tsukishima se inclinó y besó a Yamaguchi. Fue un beso lleno de significado, una promesa silenciosa de amor y compromiso. Sus labios se encontraron con una suavidad que pronto se transformó en una pasión contenida, uniendo sus corazones en un latido sincronizado.
ESTÁS LEYENDO
En lo nuestro no hay final [Tsukiyama-omegaverse]
FanficYamaguchi y Tsukishima han recorrido un largo camino juntos, desde la incertidumbre de la adolescencia hasta los desafíos de una relación adulta. Entre promesas selladas con anillos y malentendidos que ponen a prueba su amor, ambos descubrirán que a...