Mi cabeza daba vueltas, no sabía dónde estaba. Estaba todo oscuro, en las paredes había unas pequeñas rendijas donde pasaba un poco de luz, con esa poca luz podía ver unas cajas o pequeñas mantas que había por el suelo, lo raro era que el sitio donde estaba se movía haciendo que me mareara. Al marearme perdí el equilibrio y me di un golpe contra una de las paredes y creo que me desmaye.
Me desperté porque empecé a escuchar gritos, al abrir los ojos miré directamente hacia el techo pero se había convertido en unas grandes rendijas que hacían que pasara mucha luz. Empecé a escuchar cada vez más voces fuera de donde quiera que estaba, mi cabeza me dolía, creo que debido al golpe, no lo se.
Yo seguía en el suelo entreabriendo los ojos por tanta luz que me daba directamente a la cara. Hasta que de repente las rendija del supuesto techo se abrieron dejando ver un montón de gente al rededor. No conocía a ninguno. Solo sabía que se reían de mí, eso estaba claro.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Desde el suelo empecé a mirar a cada uno de ellos: unos eran altos, otros bajos, fuertes... Etc. Todos eran bastante jóvenes, parecían más o menos de mi edad, espera, ¿que edad tenía yo? ¿Cual era mi nombre? No recordaba nada literalmente. Seguí observándolos hasta que vi que uno de ellos era rubio, creo que fue el único rubio que vi de momento, entonces llamo mi atención. Tenía ojos marrones claros, un pelo rubio bastante llamativo, no parecía tener mucho músculo pero si tenía algo, era alto, creo, porque desde el suelo muy bien que se vea no lo creo.
De repente dos de ellos saltaron hacia dentro del sitio en el que estaba y me agarraron de los brazos.
-Dia uno verducho -dijo uno de ellos que parecía bastante alto y musculoso-
Entonces todos los demás empezaron a reírse aun más después de como me había llamado el tío ese. Menos el rubio el rubio se quedó quieto, creo que aún me estaba analizando para ver mis puntos débiles, ni yo los sabía así que.
-Newt, ¿estás bien? - le dijo un asiático al rubio dándole un pequeño codazo para que reaccionará -
-si, si, Minho no te preocupes - le respondió el rubio un poco sorprendido del codazo-
-porque miras tanto al verducho, ¿acaso te lo vas a ligar ya? - le dijo el asiático con un tono sarcástico mientras se reía al decirlo-
-callate - le dijo el rubio con una sonrisa-
Yo seguía sin entender nada, todos los demás seguían riendo y hablando entre si, hasta que de repente los dos chicos que me habian agarrado de los brazos me empujaron hacia fuera tirándome al suelo.
