CAPITULO 05 👨🏻‍⚕️

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                       Maratón 1/3

— Bueno entonces ustedes son Kim TN y Mateo Lowcart ¿verdad?— nos dijo el doctor Kim y los dos asentimos mirandolo.

— Esta es la oficina en la que estarás Mateo, y la tendrás que compartir con otra persona— le dijo el Doctor Kim y me sentí mal por un instante porque pensé que sería yo la que tendría que compartir oficina, Mateo me miró con una sonrisa ensu cara y yo solo bajé la mirada y el Doctor Kim me miró.

— Amm TN tu vendrás conmigo— me dijo el Doctor Kim y levanté mi mirada mirandolo incredula, pero esa mirada desapareció cuando esté me dio una mirada cálida, de veras que de cerca era muy guapo. Me quedé hipnotizadacon su belleza hasta que su voz me sacó de mis pensamientos.

— Vamos a mi oficina— me dio una mirada por la cuál miré a Mateo y esté tenía el ceño fruncido pero así sin más se metió a su oficina cerrando la puerta y yo me fui con el Doctor hacia su oficina.

Caminamos por los frios pasillos de aquel hospital, de vez en cuando levantaba mi vista para mirarlo tenía una bonita mirada, nariz perfilada y esos labios que me hipnotizaban y tenía ganas de tirarme sobre él y besarlo. Pasarón varoos minutos caminando y me detuve cuando esté habló.

— Es aquí— me dijo abriendo una gran puerta de madera. El entró y seguido de él pasé yo, era una bonita oficina había una enorme pared de cristal que daba vista hasta la ciudad de Seúl. Me quedé embobada mirando.

— ¿Te gusta?— me dijo y asentí.

— Pues que bueno que te Gusta porque vas a trabajar allí— me sañaló la oficina que quedaba al lado de la suya en la cuál de su oficina se podía ver perfectamente aquella por el cristal transparente que la dividia.

— Muchas Gracias Señor Kim— le dije haciendo una reverencia. Esté se puso justo enfrente de mi. Sentí sus ojos cafés oscuros en mis obres color Miel, sus labios estaban increiblemente cerca de los míos tanto que podía sentir su respiración y me estaba conteniendo para tirarmele encima y besarlo.

— Y tienes novio TN— me dijo y negué.

— Terminé mi relación justo antes de venir acá— le dije agachando mi cabeza.

— Lo lamento mucho— me dijo alejandose de mi y acercandose a su escritorio tomando unos documentos y entegandomelos.

— Acomodame estos documentos para mañana— me dijo y asentí. Los tomé en mis manos, hice una reverencia y salí de hay como pude sentía mi respiración agitada y mis bragas a punto de mojarse. Entré a mi oficina y me senté en mi escritorio a acomodar los documentos.

Sentí la mirada de el Doctor Kim en mi pero no me voltie y seguí organizando los documentos.

Sentí que pasarón horas de estar organizando los documentos. Y cuando me fijé por el gran ventanal de mi oficina vi que ya era de noche. Y recordé que ni siquiera había almorzado y ya casi era la hora de la cena. Miré hacia la oficina del Doctor Kim y esté seguía ahí leyendo unos documentos.

Sentí unos toques en mi puerta y pronuncié un pase. Seguido eso entró mi amiga Paula.

— Hola TN, que haces, whaoo bonita oficina— me dijo observando a todos sus alrededores hasta que miró el gran cristal y me miró sorprendida alzando una ceja. Tomo una silla y se sentó en mi escritorio frente a mi.

— Debe de ser genial, trabajar al lado de él doctor Kim— me dijo coqueta y la miré.

— Que te pasa es completamente normal— le dije restandole importancia al asunto.

— Que no si ni a Mateo lo han puesto por aquí. Comó que el Doctor tiene preferencias contigo no— me dijo con una risita en su rostro y la miré incredula.

— Es que ese papucho está como Dios manda, es todo un Dios del olimpo, que suerte que lo puedas ver todos los dias, te tengo envidia— me dijo mirando hacia el cristal babeando. Cuando dijo eso recordé la tensión que hubo entre nosotros en la oficina hoy y intenté sacar esas imagenes de mi cabeza.

— Bueno y que tal te fue todo hoy— le pregunté y está me miró sonriente.

— Super bien, los niños son muy bonitos y hablan el coreano muy gracioso— me dijo sontiendo y asentí.

— Bueno pero te falta mucho, hoy ni siquiera fuiste a almorzar— me dijo y negué. Ya solo me falataba uno.

— Bueno te espero en la sala de espera para ir a cenar juntas apresurate— me dijo Paula y asentí en lo que está ya salia de mi oficina. Luego de media hora terminé y tomé todos los documentos y salí de mi ofina para entrar a mi tortura la oficina del Doctor Kim. Toqué la puerta y seguido de eso se escuchó un pase por lo cúal entré.

— Buenas noches Doctor Kim— le dije haciendo una reverencia en lo que esté se paraba y se dirigia a mi tomando los documentos y dejandolos sobre su escritorio para volver a acercarse a mi.

— Gracias señorita TN— me dijo sin separarse de mi y lo miré.

— De nada Doctor Kim— le dije haciendo una reverencia y cuando estaba a punto de retirarme esté me tomó del brazo y me tiró hacia el pegandome a su cuerpo por lo que me sorprendí abriendo los ojos.

— ¿Qu-que hace?— le dije sin siquiera poder formular una palabra. Acercó su rostro peligrosamente al mio y sentí el calor subir a mis mejillas. Y sin poder siquiera inmaginarlo me besó tomandome de la cintura y apegandome a su cuerpo. Subí mis manos pasandolas por su cuello. Era un beso fogoso. Sentí como nuestras lenguas se ajustaban perfectamente. Me pegó más a su cuerpo sin parar el beso y dirigiendome hacia el escritorio pegandome contra este. Nos separamos por la falta de aire y esté me miró con una sonrisa cuadrada.

— Me encantas— dijo separandose de mi entregandome una tarjeta y al leera vi que era su tarjeta de representación.

— Cuando quieras me llamas— me dijo dando un corto beso en mis labios y saliendo de la oficina dejandome ahí con la respiración agitada y mi mente hecha un caos.

C O N T I N U A R Á.

               

Doctor Kim [KTH] ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora