monday.

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Como era de esperarse, el lunes a primera hora todo era un caos. Muchos estudiantes se murmuraban entre sí cuando los vieron entrar a la universidad juntos, unos los veían con poca discreción y hablaban innecesariamente alto y otros (muy pocos en realidad) solo les daban una pequeña mirada y seguían su camino, ignorándolos.

Honestamente, Mingi se sentía terriblemente ansioso. No exactamente por las miradas y voces de los demás, sino por Yunho; desde que habían llegado y las miradas indiscretas se dirigieron hacia ellos su rostro había cambiado por completo. Se veía molesto pero con una tranquilidad inquebrantable, como si supiera lo que iba a pasar y lo que tenía que hacer.

- ¿Estás bien? -escucha su voz suave a un costado. Se habían detenido en una parte del pasillo, cerca del baño de varones.

- Sí -responde, viendo hacia el pasillo.

- ¿Seguro? No parece -acusa, cruzándose de brazos y recostándose en un casillero cercano.

Mingi frunce el ceño y suelta una maldición, irritado por la actitud notablemente despreocupada del contrario.

- Ya basta, siento que tengo el corazón en la garganta y que estoy a punto de devolver todo el desayuno, ¿cómo es que te ves tan tranquilo? -se queja, observando la sonrisita que se marca en el rostro atractivo de su pareja- ¿por qué sonríes ahora? no dije nada divertido, ¡hablo en serio! -suelta un quejido más alto que es escuchado por algunos que pasan a su lado.

- Yah~ ¿No puedo sonreír ahora? -cuestiona con un tono divertido.

- ¿Acaso hay motivos para que sonrías?

- Sí.

- A ver, ¿cuales? -se cruza de brazos, esperando su argumento.

- . Tú me haces sonreír, te ves muy bien hoy -responde, marcando más su sonrisa al notar como la expresión de su rostro flaquea- ¿Te echaste labial hoy? -pregunta con un tono sugerente, acercándose peligrosamente a su rostro- Tienes los labios un poco-

Mingi lo interrumpe, poniendo su mano derecha sobre los labios ajenos que intentan besarlo en pleno pasillo. Siente la cara y las orejas tan rojas y calientes que está seguro que puede ser objeto de burla por las siguientes generaciones universitarias. No sabe qué clase de pensamientos se pasaron por la cabeza extrovertida de Yunho como para que se le ocurriera simplemente besarlo enfrente de todos pero estaba seguro que lo agarraría a golpes por ello cuando salieran de clases hoy.

- ¿Qué haces? Detente, todos nos están viendo -susurra avergonzado, queriendo ocultar la cabeza debajo de la tierra.

- ¿Y qué? Todos saben que eres mi novio ahora, puedo besarte libremente.

- S-si pero no creo que ahora sea buen momento.

- ¿Por qué no? -pregunta, con los ojos bien brillantes y abiertos y sin borrar su sonrisita traviesa.

Mingi quiere golpearle el trasero ante el cuestionamiento pero se atiene y le hace una mueca molesta.

- ¿Como que por qué no? ¿Recuerdas en la situación en la que nos encontramos?

- ¿Qué situación?

Mingi pone los ojos en blanco y entre abre los labios, incrédulo.

- ¿Quieres que te golpee acaso?

- No estaría mal -se alza de hombros, despreocupado y vuelve a recostarse cómodamente en el casillero.

Mientras tanto, Mingi siente que está a punto de enloquecer. Y no sabe si es por la actitud terriblemente despreocupada del contrario y que le irrita o porque en el fondo le gusta que Yunho simplemente se muestre tan tranquilo y seguro de sí mismo, haciendo que se vea más atractivo de lo normal.

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⏰ Última actualización: Sep 30 ⏰

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며﹑kɑppuru﹕﹪ | 𝗬𝘂𝗻𝗴𝗶❕Donde viven las historias. Descúbrelo ahora