Versos de una canción

4. Antes de la tormenta

1 de junio de 2026

POV Violeta

- Violeta, ¿en qué piensas? te está saliendo humo por las orejas. - Dijo Alex acercándose a mí.

- Esto es mi culpa, yo tengo que afrontarlo y actuar en consecuencia. - Dije lo más serena posible.

- ¿Qué vas a hacer? - Dijo Bea.

- Sinceramente, ya sé que tengo que hacer. - Con las mismas cogí mi chaqueta y salí del piso dirigiéndome a otro lugar no muy lejos de este.

Fui a su dirección en Madrid y esperé a que me abriera.

- ¿Quién es?

- Soy yo, abre la puerta. Tenemos que hablar. – Dije seriamente. No estaba para bromas.

- Voy. – Ella, sin embargo, respondió super feliz. Cosa que me irritó bastante.

Cuando me abrió la puerta subí hasta el tercer piso pensando en que decirle. Cuando la vi en la puerta con tan solo una bata, recordé lo que pasó hace dos días.

- Inicio del flashback-

29 de mayo de 2026

Granada

POV Violeta

Mis padres me habían guardado varias cajas con ropa y algunas cosas de Yulia ya que estaban de limpieza y con lo poco que pasaba por Motril no me había dado tiempo a cogerlas y dárselas. Maldita la hora que intenté quedar con ella. Había pasado un año, ella tenía pareja y yo también, volvíamos a reconducir nuestra relación y la verdad es que no podía estar más contenta.

Ya que había decidido bajar unos días a ver a mi familia, decidí quedar con ella y darle sus cosas. Me mandó su dirección y fui. Toqué en el piso en que era y subí al segundo, ya que el ascensor no funcionaba. Cuando la vi estaba con una bata y con el pelo alborotado, de inmediato me acordé de Chiara días de antes y sonreí inocentemente. Mal. Yulia me sonrió de vuelta y yo no supe cómo reaccionar así que me quedé en su puerta mirándola.

- Hola amor, ¿pasa anda? – Dijo coquetamente.

- Gracias. – Entré detrás suya.

- Si quieres deja la caja en la mesa del salón y te enseño el piso. – Dijo señalando una mesa en el salón.

- Vale. - Dije inocentemente.

- Vale, ven; esa es la entrada. - Dijo señalando la puerta, que al lado tenía un pequeño armario con un espejo. - Al lado está la cocina que es bastante cómoda ... - No era gran cosa, pero era bonita. - ... Si pasamos por esa puerta llegamos al lavadero y por el pasillo tenemos la habitación principal y el baño que están justo en frente. - Acabó de enseñármelo y la verdad es que era un gran piso, pequeño, pero estaba muy bien. Tenía el espacio bien distribuido. No tenía ni una pega.

- ¿Prefieres café, té o un refresco? ¿o agua?

- No, no me puedo quedar mucho, he quedado con estos después y tengo que pasar primero por casa. - Dije excusándome.

- Venga ya Violeta, solo un café. Por los buenos tiempos. - Miré la hora y vi que quedaba bastante así que acepté el café.

Maldita la hora en la que yo acepté el café.

- Bueno vale, pero solo uno que sino luego no hay quien coma.

- Venga vale, solo uno. - Dijo levantándose y yendo a la cocina.