Capitulo 5.

21 2 3
                                    

Todo está negro, el dolor de cabeza me esta matando e intento desesperadamente abrir mis ojos pero pareciera que hubieran sido fundidos en el mejor pegamento del mundo.

El frio hace que mis huesos duelan. Que extraño, pienso, debemos estar a mitad de invierno, sólo eso explicaría este horrible frío. Siento una pequeña molestia en mi brazo izquierdo y pum... ¡Oh Dios Mio! ¡He olvidado el pastel!. Me he quedado dormida, no puede ser, Walter debió haberme despertado. Oh Dios, creo que moriré.

Intento abrir mis ojos una vez más pero se me imposible y es cuando escucho un pitido ensordecedor que me molesta hasta el punto de querer tapar mis orejas.

¡Estoy en un jodido hospital!

No entiendo nada, estoy muy confundida, ni siquiera puedo moverme bien.
Finalmente soy capaz de abrir mis ojos y los cierro inmediatamente esperando a acostumbrarme a la luz. Al hacerlo, frunzo el ceño y noto que es una habitación de lo mas normal excepto por todas las maquinas que me rodean y la aguja en mi brazo que me confirman que es un hospital.

Mis labios duelen al separlos ya que están resecos y mi garganta arde al intentar hablar. ¿Pero que mierda me hizo acabar aqui?.

Volteo mi cabeza y noto un enorme boton rojo a un lado de la cama, algo me dice que lo presione y haciéndole caso a mis pensamientos lo hago y una alarma molesta empieza a sonar asustandome realmente demasiado. De la nada, un grupo de personas alarmadas entran en la habitación. Uno de ellos, el que entro primero, esta gritando órdenes a todo el mundo pero para bruscamente mirandome sorprendido. ¿Que es lo que le pasa?, esta loco.

-Jennifer, ¿como te sientes?.- se acerca y toma mi mano- Para decir que si aprieta mi mano una vez y para decir que no hazlo dos veces. ¿Te sientes bien?.

-No mucho.- digo y el doctor abre sus ojos hasta que casi parecen salir de sus orbitas.

-¿Como es posible?..- susurra más para si mismo que para mis oídos.- Estoy tan feliz de que hayas despertado, Jennifer. ¿Te duele algo?, ¿Alguna molestia?.

-Bueno..., mi cabeza me molesta un poco.- contestó sinceramente.

-Es normal, el accidente ha causado daño en la parte derecha de tu cabeza, por suerte no daño tu cerebro. ¿Puedes mover las piernas?.

Que clase de preguntas estúpidas hace este doctor.

Intento levantarlas pero al instante me canso y empiezo a respirar pesadamente. Me asustó terriblemente y lo intento de nuevo, pero no puedo, es como si alguien con fuerza suprema las estuviera sujetando y no puedo levantarlas. Término terriblemente cansada y ni siquiera las pude mover.

Miró al doctor con mis ojos abiertos de par en par y el me regala una sonrisa triste.

-Jennifer, siento mucho lo que te ha pasado, el accidente afectó algunas partes de ti. La mitad de tu cuerpo salió por la ventana y el resto quedó debajo del auto. Tus piernas sufrieron una fractura terrible.

-Y....y...¿no hay nada que puedan hacer?.- preguntó y en mi garganta empieza a formarse un nudo espantoso.

-Hemos hecho lo posible, pero sólo el 15% logra salvarse de este tipo de fractura y lamentablemente tu has sido el otro 85%.

Siento como mis lágrimas empiezan a brotar de mis ojos y un grito desgarrador de mi garganta haciendo que todos se alarmen, escuchó voces diciendo que me calme pero están lejanas y no puedo concentrarme en ellas, vuelvo a gritar y esta vez lo hago sin parar hasta que siento un pinchazo en mi cuello y todo se vuelve negro.

************

Un mes, un malnacido mes ha pasado desde que me entere de que Jennifer esta viva y en coma.

Mi amor por ella.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora