10

10 0 0
                                    

Me siento débil, la vida me está abandonando poco a poco.

No sé cuánto tiempo pasó. Cada día soy miserable , miro al techo esperando poder morir, aveces me quitan sangre, pero ya no lo hacen. No me estoy recuperando.

A quién sí están torturando es al perro feo. Su sangre es ácida y es muy feo. Me aburre, todo es agresión.

He notado al extraño que siempre me observa en la habitación de al lado, a través del vidrio escucho su raro lenguaje, son muchos chasquidos.

Aveces intenta llamar mi atención pero realmente no tengo fuerzas para hablar, durante las noches ronronea un poco para mí.  Pienso que es un tipo de consuelo pues inicia en cuanto empiezo a llorar.

Cada vez que lo veo recuerdo a mi hija.

La extraño.


CorruptoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora