Reina De Fuego [EN PROCESO]

capítulo 5

En el bosque del olvido

Warren me guía a la sala de estrategia del castillo abriendo un gran mapa antiguo casi amarillento por los siglos o años que tendrá.
No lo sé,en el centro del mapa dice:Bosque del olvido.
Tan solo recordar las pesadillas que tuve de ese bosque me da escalofríos,trago grueso y ocultó mi miedo.
Un guardia real habla llenando el silencio en la sala.

-Majestad en esta zona-apunta con su dedo en un lugar del mapa-Se encuentra el lago de las Sirenas llamado Alana es un lago con aguas cristalinas,tan transperente que te puedes ver a trabes de el a los lados del lago hay enredaderas de hojas y flores de colores:Amarillas,rosadas,moradas...

Es muy peligroso su majestad,dicen que esas Sirenas han ahogado a muchas personas en ese lago atrayendo las con su belleza,pero cuando ya te atrapan muestran su verdadero rostro,se cuentan que su rostro es tan horrible que enloquece a las personas.-argumenta el guardia con temor.

No pienso rendirme por eso,tendré la corona sea como sea,lo haré por mi pueblo,por mi gente.

-¿No tenemos otra alternativa?-cuestiono preparando otra estrategia mental en caso que así sea.

El guardia niega con la cabeza.

-Bien ya que no hay otra opción,eso haremos-volteo a ver a Helia para ver si objeta algo pero ella sigue con la vista en el mapa.

Me preguntó ¿Qué estará pensando?

Helia

Llevamos horas caminando por el bosque inmenso que se encuentra por el palacio,es un bosque enorme no pensé que tomaría tanto tiempo salir de los rincones del castillo.
Resopló en frustración maldito Warren.
Agarro la falda de mi vestido para que no se ensucie en el lodo no es que me importe,pero si se empapa me pesará más y no será práctico.

Warren y los guardias van más adelantados que yo,estoy caminado lo más rápido que puedo pero mis piernas cortas no me permiten seguirles en paso.

En eso Warren nota mi ausencia y gira su cuerpo en mi dirección.

-¿Podrías apresurarte pulgarcita?-se burla de mi,el muy imbécil.

En cuánto tenga la oportunidad le borraré es sonrisita de imbécil que tiene.

-y tu¿Podrías caminar como una persona normal imbécil?-cuestiono.

Me mira con esos ojos grises intenso,sus guardias contiene la respiración y retroceden un par de pasos.
Eso me asustó,un poco pero no sé lo hago notar.
Lo miro desafiante.

De la nada empieza a reir a carcajadas,es una risa ronca y profunda y debo admitir que me descolocó con su reacción.

Desde que lo ví no lo había escuchado sonreír de esa manera.

Con esa risa sus guardias se asustan aun más sus rostros están pálidos y yo no lo entiendo.

-No vuelvas a llamarme pulgarcita,me oyes-ordeno mientras sigo mi camino si voltear a verlo.
Paso por su lado y se acerca a mi oído para susurrame-eso ni lo sueñes,pulgarsita-lo fulminó con la mirada,roja del coraje.

-Haz notado-sigue el mientras afila su espada en una roca-¿qué cuando te enojas tu cara se pone roja y se pronuncian tus pecas,pulgarsita?.

Me dirijo al arrolló a tomar un poco de agua,ya que nos detuvimos a descansar supongo que lo hicieron más por mi que por ellos.

-No y deja de llamarme así-protesto cansada.

Me ignora por completo.

-y si no lo hago ¿Qué harás.... pulgarcita?-me dirige una sonrisa torcida mostrando sus dientes perfectos.