CORA

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Dejo que el fotógrafo haga lo suyo, después de haber coordinado algunos movimientos y poses continuas. Julia sonríe para mi y ella me abraza mientras el fotógrafo hace algunas para nuestro portafolio en conjunto que prometimos a una de las marcas.

Dejo mi celular contestando un par de mensajes de papa y mama. Pero los chicos deben seguir en reuniones no eh tenido señales de ellos.

Mark, a estas horas esta en clases y si no esta en el gimnasio o estudiando. Dejo mi maleta caer en la cajuela del avión y me siento junto a julia. Ella se coloca sus audífonos y yo tomo mi libro y mi música. El vuelo se vuelve corto después de una buena siesta. La casa esta en silencio, cojo una de las camisas de los chicos y me voy a la habitación.

Dejo las cosas listas para mi mañana de entreno, estar con los chicos trabajando es genial jamás pensé que modelaría y que mi rostro estuviera en revistas y que las rede sociales me siguiera mucha gente. Aunque no las controles las manejo a mi antojo subiendo fotos de lo que hago no mostrando lujos, pero si lo que me gusta hacer.

Julia está acostumbrada a tener seguidores, pero yo no lo estoy, ella disfruta subir su día a día y respeta mí privacidad. Pero la gente siempre pide más. Sonrió al ver los comentarios sobre lo guapo que están los chicos y que siempre han querido que uno de ellos se dedique a las cámaras como las fotos. Ella esta acostumbrada al lujo yo deseaba tener que trabajar hasta el sudor y disfrutar de mi cama como cada noche hace un año y unos cuantos meses.

Dejo mis cosas en la cama, dejandole un mensaje a Mark para que cenemos juntos. Voy por un postre o algo del cajón de Mark de dulces. El timbre de la casa llama mi atención. Julia enmarca una seña con sus manos de silencio y me acerco a ella marcando le a mark.

Un hombre de una mediana edad recorre el jardín los chicos de jardinería no están de turno. Muevo mis manos a que se agache odio estos malditos hijos de puta, los guardaespaldas fueron por comida, les envío un mensaje de SOS.

Muevo a julia de mi lado y activo la alarma de seguridad. Julia escribe mensajes por el grupo de la casa y mi celular suena.

Llamada entrante.

Dejo la cobardía la policía debe estar a unos minutos, julia sale de la casa junto conmigo agarrada de la mano, vivir en la ciudad en medío de la nada no me esta gustando. El hombre se acerca y le grito que está en propiedad privada que no deberia estar aquí.

-No tiene la autorización de estar en esta propiedad privada, la policía y mi esposo esta por llegar debes irte- camina más rápidamente y corremos cerrando la puerta detrás de nosotras viéndolo alejarse. Muevo mis manos abriendo la cortina y desaparece por el gran portón por la puerta de al lado.

-Se ah ido, hijo de puta debemos contratar más seguridad si save que estábamos solas debemos ver las camaras, caminamos a la sala de cámaras y ellas están apagadas. no están conectadas.

Conecto las cámaras y busco los últimos archivos. Los chicos dejan las bolsas y revisan la zona junto con la policia. Mark baja del auto con su celular en la mano, nos revisa a las dos. Habla con la policía y los guardaespaldas se disculpan con el y con nosotras.

-

Esta bien chicos son muy buenos solo que es muy poco personal- mark se gira y les da ordenes ellos desaparecen en unos segundos. Los tres nos sentamos abriendo los paquetes de la comida, les dejo en las bandejas a los chicos de seguridad y ellos se vuelven a disculpar.

-Hablaremos con Eliot cuando vuelvan, enviarán más seguridad y no podrán salir sin seguridad hasta que lo arrestren, no se discutirá con ni una de las dos- las dos a sentimos y sonrió al verlo con su cabello largo y mal cuidado.

LA SUMISA DE LOS SOLLERDonde viven las historias. Descúbrelo ahora