Cásate conmigo - Christopher Vélez.

6

Si alguien me hubiera dicho que estaría casada con dos hijos, dos nietos perrunos y una suegra maravillosa; me reiría y diría que no era posible. Sin embargo, todo es así a dos horas de haber llegado a la casa de Chris. Mamá Yenny me había recibido como una hija más, incluso me preparó una cena increíble y luego de eso, se despidió para irse a dormir.

—¿Te molesta que compartamos habitación? Digo, puedes dormir en la cama; mientras yo hago mi stream.

—¿Dónde dormirás?

—En el sofá.

—No, no puedes dormir en el sofá.

—Sí puedo y no es problema, mientras estés cómoda, todo estará bien.

—Te prometo que conseguiré un lugar en donde quedarme pronto.

—Nada de eso, usted es nuestra invitada de honor. Además, Ollie me mataría si te tratara mal.

Sonrió—gracias por todo Chris, te debo mucho.

—No es nada, tu hiciste todo por mi y perdiste, ahora me toca a mi hacer algo por ti.

—No quiero que pienses que me debes algo.

—Nada de eso, somos dos amigos que nos ayudamos mutuamente.

—Gracias de nuevo—le sonrió.

—¿Me ayudas en el stream?

—¿Bromeas? No sé nada de eso.

—Te enseñaré, solo me leerás los comentarios, porque a veces olvido algunas cosas.

Me comienzo a reír—estás mal.

—¿Sabes?—le miro—aun no sabemos nada de el otro.

—Es cierto, supongo que será otro día.

—¿Ahora?

—¿Y tu Stream?

—Aún es temprano.

—Son casi las ocho de la noche.

—Es temprano, linda, además, así voy lavando los platos.

Sonrió—bien, bien. Pregunta.

—¿Qué trabajas?—Me pregunta, recogiendo los platos.

—Soy residente de cirugía cardiotorácica.

—Diablo loco, eso es...increíble, mi esposa es muy, muy inteligente.

Le ayudo lavando los platos—No mucho—digo riendo—¿Si no fueras cantante qué serías?

—No tengo ni idea, cuando era más joven hice un poco de todo, ahora me gusta hacer streams para mis fans y créeme no es fácil.

—¿De qué tratan tus stream?

—De todo un poco, más de juegos.

—¿Me enseñarías a jugar?

—Claro que sí—me dice sonriendo.

—¿Mañana debes levantarte temprano?

—No, tengo turno en horas de la tarde hasta la noche.

—Perfecto.

Y como prometió, me abrió una cuenta en Fortnite y me fue explicando un poco hasta la hora de su stream. En su habitación, la música se escuchaba—esas niñas te quieren muchísimo—le digo al leer los mensajes.

—Y yo a ellas, este es mi Chatsito, con ellos hablo y juego durante horas. Soy el mejor en esto—dice orgulloso—ya lo verás.

—¿Tienes hermanos?