Preludio

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CW/Temáticas/No sé:
¿Cuenta como voyeurismo si miras una grabación de tus novios? No creo-
Trans4Cis MLM
Degradación y humillación (tenue)

Era extremadamente gracioso el que hubiera empezado a llamar a sus roomies sus novios considerando que habían intentado matarse con martillos múltiples veces en el pasado. Pero para Edd era su nueva realidad.

No era una historia súper compleja, simplemente Matt le pidió salir, aceptó, y como él ya estaba en una relación abierta con Tom se volvió algo así como su novio indirecto. Novio de mi novio era latero de decir.

Lo más chistoso fue que después de eso, la relación se volvió cerrada. Se dieron cuenta de que no necesitaban a nadie más, con ellos tres era suficiente. Tenían amor suficiente para compartir entre ellos (y un mecanismo de contención por el bien del resto, pero no indagaré en eso).

Pero esta anécdota empieza en un día regular. Con Edd pidiendo un favor a Matt.

— ¿Y para qué querías mi compu? — cuestionó el pelirrojo, enchufando un USB con forma de lata en ella (obviamente era de Edd).

— Por la quincuagésima vez- La mía decidió actualizarse y aún no termina. — se quejó el castaño — Me enviaron un archivo que pedí hace meses, lo saco y te la devuelvo.

— Bah. Sólo no le metas un troyano. — y se marchó.

Ignoró la actitud petulante de su querido Matt, y abrió el navegador, para poder así acceder a su correo y obtener el swf enviado. Era media parte de una colaboración con un amigo virtual.

La descarga tomaría un tiempo, ¿cuanto? Ni idea, el navegador no decidía si eran tres días o cuarenta minutos. Así que podía tener eso por un lado y ver que mierda le había metido a la computadora su dueño. Porque conociéndolo perfectamente podía haber un ecosistema de sólo viruses.

El fondo era una foto del mismo dueño, que debía admitir, lo hacia ver como un absoluto ángel. Caía el crepúsculo, estaba a contra luz, mirando hacia quien sabe donde, como si tuviera un pensamiento serio en esa cabeza suya. El sol resplandecía, haciendo brillar sus ojitos claros.

Las carpetas, programas y otros archivos de menor relevancia se aconglomeraban a los bordes. Cosas como Word, Steam, Adobe Audition, las carpetas por defecto y dos peculiares.
Una titulaba Tommee, la otra titulaba Eddie.

Le entra la curiosidad- ¿qué clase de cosas guardaba ahí?
Así que hizo click, abriendo aquella con su nombre.

Eran fotos suyas. Muchas. Una casi completa colección, sólo faltaban fotos suyas de previo a conocerlo.

Fotos que tenían enmarcadas, fotos que había pedido de su madre "por si acaso" de cuando era un infante, fotos que sacó con la calidad mediocre de su teléfono. Pero todas las incluían a él como la estrella del show.

La sonrisa que se le formó le hacía doler las mejillas. Así que copió ambas carpetas a su USB, para poder tenerlas a mano. Quizá haría lo mismo y coleccionaria fotos de Matt... Si es que le quedaba espacio.

Hablando de Matt... El regresa, nota lo que está viendo, y queda en blanco.

—¡Ah! Mattie, ya terminé. — nota que su archivo está listo, lo copia al mismo dispositivo y una vez terminado lo desconecta, destinado a regresar a su pieza — Gracias.

Y lo besa cerca de sus labios. No en ellos, pero cerca. Y el pobre no puede estar más confundido.

Porque estaba convencido de que alcanzó a ver otra cosa.

Sabes que me enloqueces - EddMatTomDonde viven las historias. Descúbrelo ahora