El sol de la mañana se filtraba a través de las cortinas, anunciando un nuevo día en la escuela. Jungwon se despertó con una mezcla de emociones. La tarde anterior había sido un torbellino de sucesos y aún no sabía bien cómo sentirse. Después de un rápido desayuno, se dirigió al estudio de baile en el colegio para continuar practicando su solo, decidido a perfeccionar cada movimiento antes de la presentación.
Por dentro, también se sentía ansioso, no es típico de persona de poder manejarse bien frente a muchísimas personas, especialmente si estuviera mostrando sus talentos. La entrenadora había dialogado con los oficiales del equipo de baloncesto del colegio, estos iban hacer un evento para el equipo, eligiendo a Jungwon para demostrar apoyo hacia el equipo con una coreografía solo.
Jungwon al escuchar esa noticia, se sintió emocionado y a la vez una mezcla de nervios, debido a que otros estudiantes del club estaban ansiosos por ser elegidos para una coreografía solo.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Mientras caminaba por los pasillos, se encontró con Riki, quien le dio una palmada amistosa en la espalda seguido a un abrazo.
-Jungwonie, ¿estás preparado para otra sesión de práctica?- Interrogó emocionado. -Necesito que sea lunes para verte presentar- agarró las mejillas del menor con ternura.
Jungwon asintió, aunque sus pensamientos estaban dispersos. -Supongo que sí, ahora mismito necesito una pequeña merienda- Puchereó. -Voy a ir a la cafetería, vuelvo en un momento. - Sonrió.
En la cafetería, el chico de ojos había elegido unas galletas y un jugó de fresas. Mientras se dirigía a la caja, accidentalmente se encontró con Sunghoon. Los ojos de ambos se encontraron y, por un momento, el tiempo pareció detenerse.
-Ah... Hola, hyung - dijo Jungwon tímidamente, sintiendo un leve rubor en sus mejillas.
-Hola, Jungwon- respondió Sunghoon con una sonrisa. -¿Cómo va tu práctica?-
-Bien, solo necesitaba un descanso rápido - Jungwon levantó su merienda como explicación. -¿Te importa si me siento contigo?- preguntó con más timidez aún, sintiendo su suaves mejillas arder.
Sunghoon asintió con la cabeza, señalando la silla frente a él. -Claro, siéntate-
Mientras Jungwon se acomodaba, ambos comenzaron a charlar. La conversación fluía con facilidad. Sin embargo, pronto se adentraron en temas más personales.
-¿Estás nervioso por tu presentación?- preguntó el de lunares, sus ojos llenos de genuina curiosidad.
-Un poco...- admitió el menor. -Quiero hacerlo bien, especialmente porque van haber muchas personas y la entrenadora me va estar viendo- continuó.
Sunghoon sonrió, transmitiendo comodidad. -No te preocupes mucho sobre eso, lo vas hacer bien- aseguró, mirando al de baja estatura.
La conversación continuó hasta que ambos se dieron cuenta de que era hora de volver a sus respectivas prácticas. Jungwon se levantó, sintiendo una nueva ola de confianza. -Gracias por hablar conmigo, Sunghoon hyung. Esto realmente me ayudó - Con tal confianza, se atrevió a abrazar al mayor.
