➳ 𝑃𝑒𝑟𝑠𝑝𝑒𝑐𝑡𝑖𝑣𝑎 𝑑𝑒 𝑀𝑎𝑡𝑖𝑎𝑠 ➳
La premier de "La Sociedad de la Nieve" estaba en pleno comienzo.
Luces deslumbrantes, cámaras por todas lados y una alfombra roja que parecía interminable.
Mientras me encontraba conversando con algunos periodistas, respondiendo preguntas sobre mi papel en la película y mis expectativas para la noche, no podía evitar sentirme en la cima del mundo. La emoción en el ambiente era palpable.De repente, mientras hablaba con los reporteros, vi a Enzo, mi compañero de trabajo y amigo, llegar acompañado de una joven.
La chica tenía una sonrisa radiante y ojos que brillaban con curiosidad y emoción, destacándose entre la multitud.
Mi curiosidad se despertó al instante— ¡Matías! —exclamó Enzo, abriéndose paso entre la multitud— Quiero presentarte a alguien muy especial.
Me excusé de los periodistas y me acerqué a Enzo, curioso por conocer a la joven que lo acompañaba.
—Matías, ella es mi hermana, Julieta. Julieta, él es Matías, de quien tanto te había hablado
Y ahí estaba ella, frente a mí. Julieta.
Su nombre resonó en mi mente como una melodía suave.
Tenía el cabello castaño, ligeramente ondulado, que caía en cascada sobre sus hombros.
Sus ojos, grandes y expresivos, eran de un color avellana que parecía capturar la luz de una manera mágica, reflejando una calidez y una profundidad que me dejaron sin aliento. La piel de Julieta era suave y ligeramente bronceada, con un brillo natural que le daba un aire saludable y vibrante.Su sonrisa... esa sonrisa podría haber iluminado el lugar por sí sola. Era una sonrisa auténtica, de esas que te hacen sentir como si todo estuviera bien en el mundo. Cuando me miró, sentí como si una corriente eléctrica pasara entre nosotros. Había algo en ella, algo en su mirada y en su manera de pararse, que me hizo sentir una conexión instantánea y profunda
Julieta extendió su mano con una sonrisa.
— Encantada de conocerte, Matías. Enzo no dejado de hablar de vos y de lo bien que se llevan en el set
—El gusto es mío, Julieta —respondí, estrechando su mano— Enzo es un gran compañero y amigo.
Mientras conversábamos, la química entre nosotros era evidente. No podía evitar sentirme atraído por su simpatía y encanto. La conversación fluía con naturalidad, y pronto estábamos riendo y compartiendo anécdotas.
—Matías, ¿te molesta si te robo a mi hermana por un rato? —dijo Enzo, con una sonrisa juguetona— Necesito presentarle a algunas personas más.
— Si, obvio Enzo. Nos vemos luego, Julieta —respondí, devolviéndole la sonrisa.
Mientras Enzo y Julieta se alejaban, no pude evitar seguirlos con la mirada, impresionado por la energía y la calidez de Julieta.
La noche continuó con entrevistas y fotos, pero no podía dejar de pensar en ella.
Después de la premier, se organizó una fiesta en un lujoso hotel cercano. La música llenaba el aire y la gente disfrutaba de la celebración.
Después de un rato de conversación con otros invitados, decidí buscar a Enzo para agradecerle la invitación.
Lo encontré junto a Julieta, conversando animadamente con otros actores y actrices. Al verme, Enzo sonrió y me llamó para que me uniera al grupo.
—Mati vení, estábamos hablando sobre nuestras escenas favoritas —dijo Enzo—. ¿Cuál fue la tuya?
—Definitivamente la escena en la montaña con Agus—respondí— Fue desafiante pero gratificante. ¿Y la tuya, Julieta?
— Todavía no vi la película completa, pero por lo que Enzo me contó, creo que esa también va a ser mi favorita —respondió Julieta con una sonrisa
La conversación se animó aún más cuando otros actores se unieron, compartiendo sus experiencias y risas. Me sentí cómodo y feliz, especialmente con Julieta a mi lado. Los demás notaron la conexión entre nosotros y no pudieron evitar hacer comentarios.
—Parece que alguien encontró una nueva amiga especial —bromeó Juani, uno de los más jodones por así decirlo, del grupo, guiñándome un ojo
—Bueno, no puedo negar que estoy disfrutando de la compañía —respondí, sonriendo a Julieta.
Mientras la noche avanzaba, Julieta y yo encontramos un momento para hablar a solas. Nos sentamos en una terraza con vistas a la ciudad iluminada, alejados del bullicio de la fiesta.
— Quiero decirte algo Juli, es que sos tan encantadora como tu hermano te describió —le dije, mirándola con sinceridad
—Gracias, Mati. Vos también sos exactamente como Enzo dijo: talentoso y muy amable —respondió Julieta.
Hablamos sobre nuestras vidas, nuestros sueños y las cosas que nos apasionaban.
Descubrimos que teníamos mucho en común, desde el amor por la actuación hasta pequeños detalles personales que nos hacían reír.
—Siempre admiré a los actores por su capacidad de transformarse en diferentes personajes —dijo Julieta— ¿Cómo empezaste en la actuación?
—Fue algo que siempre supe que quería hacer —respondí— Desde pibe, me encantaba contar historias y hacer reír a la gente ¿Y vos, tenés algún interés en el mundo del cine?
—En realidad, sí. Siempre he querido trabajar detrás de cámaras, quizás como directora o guionista —dijo Julieta, con una chispa de pasión en sus ojos.
—Eso suena increíble. Estoy seguro de que serías excelente —dije, admirado por su determinación.
La noche avanzaba y la fiesta comenzaba a disminuir. Nos dimos cuenta de que habíamos pasado horas hablando sin darnos cuenta del tiempo.
Nos despedimos de los demás y salimos juntos del hotel, caminando por la acera iluminada por las luces de la ciudad.—Me alegra mucho haber venido esta noche —dijo Julieta— No solo por la película, sino porque pude conocerte.
—El sentimiento es mutuo, Juli. Esta fue una noche increíble gracias a vos —respondí
Nos detuvimos frente a un parque cercano, donde las luces de la ciudad se reflejaban en el lago tranquilo. Tomé la mano de Julieta, sintiendo que había encontrado a alguien especial.
— Me gustaría verte de nuevo ¿Querés salir conmigo algún día? —pregunté, con un tono sincero y esperanzado.
Julieta sonrió, su corazón latiendo con fuerza.
— Sí, Matías.
xfavor opinen!
los quierooooo