Verdes campos cubiertos de una brisa matinal, nubes descoloridas se alzan en el cielo; el horizonte se hace extenso. Las ruedas giran velozmente para disipar la vista ante nuestros ojos, copos de nubes se disfrazan de blancas luces, no veo la línea que separa cada día, la primavera está llegando a su final más rápido de lo que esperé. El verano vendrá para irradiarme con su sol, quiero revestirme de viento y surcar sus cielos, quiero ser feliz aunque tal vez la felicidad no esté hecha para mí. Quiero que ese arcoiris invisible atraviese cada uno de mis sentidos, ser cubierto con la brisa y que el polvo del que estoy hecho cuente historias a los niños futuros; quiero ser luz, quiero ser nubes, quiero ser la brisa matinal, la lluvia torrencial. El paisaje se aleja y da paso a nuevos trazos de esperanza, los árboles expanden sus raíces, las heridas se vuelven cicatrices; quiero que seas el agua de los ríos, los frutos de las plantas, la semilla de la paz. Tu mente reproduce los sonidos que extrañas, trae a tu nariz los olores del pasado para hacerte recobrar la esencia de tu juventud, para hacerte comprender la esencia de tu vejez; blancas luces cubiertas de nubes, no hay línea que separe cada día, pero hay días para separar cada línea de tu vida, vendrá el verano para iluminarnos con su sol y seremos viento para la esperanza del futuro.
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POEMAS CASUALES
PoetryAntología de poemas que he escrito casualmente. Quizá no tan casual.