Cᴀᴘíᴛᴜʟᴏ 10

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Carlos  parecía desconcertado con su repentina llegada.—¿Qué haces aquí?

—Necesito hablar contigo, es importante.

—Charles, no es el mejor momento para hacerlo, ¿Por qué no mejor hablamos en otro momento?— su voz iba bajando de tono, mientras recargaba su cuerpo contra la puerta.

—Pero es sobre Jules, no puedo dormir pensando en ello.—confesó, jugando con la correa de su bolsa.— Por favor, Carlos.

Movió sus labios como si quisiera gesticular algo, pero nada salió cuando se sintió mareado y todo su peso cayó sobre la puerta, debilitándose. Charles lo miró con sorpresa y miedo, sin esperar verlo tan mal de forma repentina.


-Oh dios, Carlos, ¿Qué ocurre?— se adentró para sujetarlo, haciendo que uno de sus brazos se envolviera sobre sus hombros y recargar parte de su peso en él.

-No me he sentido bien en estos días.— confesó, colocando su mano sobre su rostro.— Solo necesito sentarme, ya pasará.

—¿Y por qué no vas al doctor? No estás bien, no es algo ligero.—cerró la puerta con un simple empujón y se encaminaron a paso lento hacia la sala, dónde Carlos se recostó en el sillón mientras Charles miraba a su alrededor.—¿Qué es lo que sientes?

-Solamente es una simple gripe, ya se me pasará.—Gruñó en respuesta, restandole importancia.

-Cuando te llegabas a enfermar era un martirio, de lo terco y testarudo que eres jamás lograba que tomaras tu medicamento.— recriminó en su contra, cruzándose de brazos.— Y viendo tu estado, no es una simple gripe, ya es más que eso.

-Sólo estás exagerando, estaré bien para mañana.

—¿En dónde está tu habitación?— cuestionó, sorprendiéndolo.

-¿Por qué?

-Porque es mejor que estés acostado, que estar aquí. Te ayudaré a ir y luego veré si compro algún medicamento para que empieces a tomarlo, si no quieres ir al doctor entonces tendré que recurrir a otros medios.— sentenció decidido, esperando a que le señalara el lugar.

No supo que decir, por lo que se limitó a incorporarse con su ayuda y caminaron con paso calmado hacía la habitación. Lo ayudó a recostarse mientras lo miraba en silencio cuando terminó de acomodarse.

—Iré rápido a la farmacia, llevaré mi celular por si se te ofrece algo más, ¿De acuerdo? No hagas mucho movimiento, solo reposa mientras vuelvo.

-¿Por qué haces esto?— cuestionó, dejando a un lado todo lo dicho.

-¿Hacer qué?— preguntó de
vuelta, confundido ante su
cuestionamiento.

-El cuidarme, no tienes qué hacerlo porque no somos nada, ¿Por qué te empeñas en hacerlo?

Y mientras esperaba una respuesta con el ceño fruncido, Charles no supo que decir. ¿Cómo podría justificar su repentino interés? Había actuado por inercia, porque verlo en ese estado siempre había sido su debilidad y solo quería verlo bien siempre. ¿Por qué sentía la necesidad de cuidarlo a pesar de todos los años separados que habían pasado? Ni siquiera pasaban de simples conocidos, mucho menos luego del suceso de Jules, ¿Por qué sentía entonces esa necesidad?

Y sin responder a su pregunta, agarró sus cosas y se dispuso a salir antes de que pudiera decir algo que no debería, dejando a Carlos confundido y desesperado por una respuesta.

°•°•°•°•°

Carlos no había mejorado mucho conforme el tiempo pasaba; Charles se había encargado de prepararle algo para que pudiera comer y tomar el medicamento, pero la temperatura había brotado y sus múltiples quejidos solo iban en ascenso.

Lᴏᴠᴇ ɴᴇᴠᴇʀ ғᴇʟᴛ sᴏ ɢᴏᴏᴅ | CharlosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora