(Craig)
Puede que sea extrovertido, pero hacer amigos no es mi mayor talento. Llevo con Clyde, Jimmy y Token desde la guardería, y no nos separamos desde entonces. Por eso me gustaba la idea de hacerme amigo de alguien más... Aunque antes casi le partiese la cara. Parece un buen chico... Feroz, pero un buen chico. He oído por ahí que sabe boxeo. La verdad, no se porqué no tiene a las chicas detrás suya. Es... Atractivo. Tiene unos ojos que no había visto en mi vida. Azules con amarillo. Y apuesto lo que sea a que, si se dejase de tirar del pelo y se peinara, esos mechones rubios le darían un toque encantador. Cuando me doy cuenta, estoy sonriendo como un tonto, mirando el corazoncito con el que he reaccionado a su mensaje. Me gustaría ir a verle, pero no quiero molestarle. Seguramente esté muy ocupado. No quiero molestarlo...
"Tenéis alguna hora en la que no haya demasiado ajetreo?"
Espero un rato. Seguramente esté ocupado con todos los pedidos. Me lo imagino con su delantal y sonrió un poco. ¿Que me pasa? Pillo los libros y los meto a la mochila. Tengo un examen el jueves y, no amo el café.. pero una tacita no me haría daño. Me pongo mi chaqueta con mis parches y me preparo para salir de casa.
-¿Dónde vas? ¿No tenías examen en dos días?- Oigo a mi madre desde la cocina.
-A estudiar a una cafetería.
-Ni si quiera te gusta el café. ¿No habrás quedado con los chicos y estás escaqueando te, uhm?
-No, mira, llevo los libros.- Abri la mochila y le señalo los cuadernos y mi cartera.
-Oh... Hay alguna chica, ¿No?
-Psft, no, mamá.- Suspiro, poniéndome rojo al pensar en ir a la cafetería solo para ver a... Tweek. No. Ni si quiera lo conozco bien. Y no soy gay. Me gustan las tías. Están todas encima mia. Me adoran...¿Pero yo las adoro?
-¿Craig?-Noto que mi madre estaba hablándome pero no me había dado cuenta.
-¿Uhm?
-Que no vuelvas muy tarde.
-Si, si... Hasta luego.
Cierro la puerta y miro el móvil.
"Quizá en una media hora, después de la hora del almuerzo."
"Guay."
En menos de veinte minutos estoy en la cafetería. Es un lugar clásico, no una de esas cafeterías de grandes cadenas que te sirven cafés de mil millones de sabores. Por alguna razón, tenía esa aura acogedora y eso que ni si quiera había entrado. Al abrir la puerta, noto dos cosas: las campanitas que suenan cuando entro y el va y ven de la gente, muchas apresuradas para salir al trabajo, otras charlando con amigos y otros estudiando a o escribiendo en sus ordenadores portátiles. Veo una mesa vacía en la esquina y me siento, sacando mi libro de matemáticas y el cuaderno. Empiezo a escribir fórmulas, intentando concentrarme, pero es difícil. Ahora me he dado cuenta de que hay una musiquilla suave de fondo, pero a penas se oye por el charloteo de la gente. Me entra calor y me quito el gorro y la chaqueta, quedando en mi camiseta de manga corta con el logo de la Nasa. Es mi favorita.
-Buenas ¿que podría servirle? ¿Necesita un menú?
Alzó la cabeza, sonriendo al ver al rubio, aunque al momento me tapo la cara, avergonzado de mis brackets.
-Hola, Tweek.
-¿Te conozco?- Pregunta, bajando su cuadernillo de comandas. Es entonces cuando me mira los ojos y hace un ruidillo de sorpresa.- Oh, hey, Craig. ¿Cómo tú por aquí?
-Necesitaba estudiar y en mi casa estaba mi hermana con sus amiguitas, así que...- Mentira. Mi hermana no si quiera estaba en casa. No se por qué he dicho eso.
-Bueno, no es que esto sea un lugar demasiado tranquilo...
-Seh, pero tenía ganas de tomar algo.- Ala. Combo de dos mentiras. Como ya he dicho antes, ni si quiera me gusta el café. De hecho, lo odio con pasión.
-¿Necesitarías una carta?
-Recomiendame algo.
-Nah... Tengo gustos ratitos para el café. Me gusta con casi nada de azúcar ni leche...
-Pfts... Entonces si, necesito un la carta. Perdona por entretenerte.
-Nah, está bien, no te preocupes. Ahora vuelvo con tu menú.
Acabo un par de ecuaciones cuando llega con una carta plastificada, con varias bebidas y postres.
-¿Se te antoja algo?
-Café con caramelo... ¿Lo has probado?
-Si. He probado todos. Soy básicamente el catador de mis padres. Y la verdad, el de caramelo está bastante bueno...
-Pues ese, entonces... Y un cupcake de arándanos.
-Oh, no creo que te gusten... Los hago yo, y hoy se me han quemado un poquillo.
-No te preocupes. Podré soportarlo.- Digo, sacando la cartera.- ¿Cinco dólares?- Pregunto, revisando los precios del menú.
-Con tres me valen. Invito al cupcake.
-Oh, no, no... En serio, insisto.
-Insisto más.- Me sonríe, no queriendo aceptar el dinero.
-Vaya, tendré que intentar partirte la cara más amenudo para llevarme cosas gratis...
Le escucho reír y se me para el corazón. No puedo evitar sonreír también, pero, al ver que se fija en mis brackets, vuelvo a mi gesto serio.
-Me gustan tus brackets. El azul te sienta bien... Lo digo por las ligas.
-Ah, ehm... Gracias, supongo. Son una tortura, pero... Supongo que merecerán la pena.
-Ya verás que si. Ahora vuelvo con tu pedido.
Se aleja hasta el mostrador a dejar la comanda y sigue atendiendo a más gente, mientras yo guardo mis libros. Al rato, deja las cosas en mi mesa, pero no me dice nada. Miro el café, en unos de esos vasitos de corcho que mantiene el calor, y veo algo escrito que no es mi nombre...
"Mi ig: @YourCoffeBeam_01"
Le miro y lo veo atendiendo a otra chica, sonrojandome. Tiene el lazo del delantal desatado, y casi se le cae. Le tomo un sorbo al café y veo que se acerca a la mesa que está al lado mía. De repente, no puedo controlar mi cuerpo y me levanto a atarle el cordón.
-Ay, gracias.
-No es nada.
Me llevo toda la tarde "estudiando" hasta las 7... O mejor dicho, robándole miradas a Tweek. Cada vez siento que estoy más... Colorado.
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Ese maldito chico... -Craig x Tweek-
FanfictionMaldito sea ese idiota, malditas sean sus altas notas en los exámenes, maldito sea su carácter de mierda...Malditos sean sus ojos azules con matices amarillas. Maldita sea su nariz redondita y respingona. Malditos sean esos labios. No puedo más.