Alexia Calloway, la hija de la gran estrella Clay Calloway, lleva viviendo dos meses en el piso de arriba de Ash, su mejor amiga, ya que se fue de su casa cuando su padre le prohibió hacer lo que más le gustaba: cantar.
Pero ve su oportunidad en el...
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A la mañana siguiente, Alexia llegó al teatro algo fastidiada porque Ash había dicho que tenía que pensarlo un poco más. El fastidio se alivió al ver al gorila sujetándole la puerta para entrar.
—Ey, grandullón—sonrió al verlo
—Hola, Alexia—sonrió él
—Puedes decirme Lexy—sonrió esta y el gorila sonrió
—Lexy—asintió y señaló al interior con la mirada—Después de tí.
—Gracias—la leona pasó y el gorila la siguió rápidamente
Los dos llegaron al escenario con el resto de concursantes y Moon apareció también.
Alexia alzó la ceja al oler que Moon tenía el mismo olor que el teatro.
¿Acaso había dormido allí o algo?
—Bueno, chicos, este escenario es el campo de batalla y vuestra canción es vuestra arma—presentó Moon—Solo tendréis una oportunidad de sorprender al público, así que escoged bien entre las canciones que he seleccionado para cada uno.
Repartió unos papeles y Alexia sonrió cuando Ash llegó a ponerse junto a ella. La puercoespín le guiñó un ojo.
—Ey, veo que al final has convencido a ese novio tuyo—sonrió Moon al verla
—Lance es un artista, no espero que lo entienda—negó Ash
—Tienes razón, no lo entiendo—negó Moon dándole el papel y siguió su camino
Ash puso una mueca de indignación y Alexia se rió, a lo que la puercoespín le dio un golpe en la pierna.
—Bueno, veréis que cada lista incluye sugerencias de vestuario e interpretación—siguió Moon y Alexia alzó una ceja al leer su lista—¿De acuerdo? Genial, ahora la señorita Crawley los llevará a su sitio para ensayar.
—Esta lista...—murmuró Alexia mirando su lista
—A ver...—Johnny se acercó a leerla y Alexia sonrió al ver "piano" escrita en el papel de Johnny
—Vaya, grandullón, ¿piano?—se sorprendió
—¿Qué?—Johnny se alteró al ver piano en su papel y miró a la leona—Perdóname un segundo.
—Perdonado—asintió Alexia divertida
Johnny salió corriendo a por Moon.
—¿Señor Moon? Aquí dice que toco el piano—comentó nervioso
—Sí, imagina a un tiarrón como tu acariciando las teclas—sonrió Moon—Les pondrás los pelos de punta.
—Pero...No toco el piano desde niño—negó el gorila
—Señorita Crawley, necesitaremos unas clases de piano—comentó Moon
