love for the enemy~• (soukoku)

6.

Ya había pasado una semana desde que Chuuya, Dazai, Atsushi y Akutagawa empezaron la vigilancia hacia la nueva organización criminal denominada "bakuten", se caracterizaban por realizar sus robos sin desactivar ninguna alarma ni seguridad, y siempre las cámaras los mostraban haciendo piruetas esquivando así cualquier trampa.

Lo más extraño de todo esque al día siguiente, lo que robaron volvía a estar en el lugar al que pertenecía, por lo cual tanto la agencia como la Port mafia no tenían razón para destruirlos...aún.

La relación entre el doble negro y el nuevo doble negro había mejorado de una manera drástica durante estas misiones, aunque seguían peleando con la misma intensidad y frecuencia, sus discusiones dejaron de ser peleas entre enemigos, y pasó a ser más por costumbre, yo incluso podría decir que se hicieron más íntimos.

Este día, un sábado en el que no tenían la misión de vigilar a bakuten, la Port mafia y la agencia armada de detectives se unieron para pasar un buen rato, exactamente, ambas organizaciones fomentaron sus lazos, por decirse así, que dejaron de ser alejadas momentáneas y por beneficio a ser organizaciones amigas con diferencia de pensamiento.

Incluso podrían encontrar agentes de la agencia en la Port mafia, y mafiosos en la agencia; pero volviendo al tema de la reunión.todos estaban muy felices hablando con los demás sin importar en que organización estuvieran, cuando una conversación algo peculiar surgió a la luz entre Rampo, Tachihara, Kenji, Junichiro y Kajii.

-¿Eh?, ¿Están diciendo que Rampo-kun es novio de un ex-miembro de Guild?- preguntó Tachihara sorprendido mirando a Kenji quién asentía felizmente.

-nop, Edgar no es mi novio- dijo Rampo mientras tenía una paleta en la boca y miraba a todos con aburrimiento.

-pues, parecen novios- intervino Tanizaki mirando a Rampo nerviosamente.

-¿Ah?, ¿Por qué motivos?- preguntó Rampo desconcertado.

-pues, casi siempre están juntos, lo dejas que resuelva casos contigo cuando siempre decías que no necesitabas un compañero, siempre quieres ser el primero en leer sus historias, te regala dulces cada que viene a la agencia y...¡Se gustan!- enumeró Kenji mientras sonreía, diciendo lo último en un grito un poco alto llamando la atención de todos.

-¿De qué hablan?, ¿Quién gusta de quien?- preguntó Higuchi acercándose a los chicos junto con Kyoka, Yosano, Gin y Koyo.

-estamos hablando de que a Rampo le gusta Edgar- respondió Kajii mientras miraba a Rampo-kun acusadoramente- quién en un agente de una organización enemiga tanto de la agencia como de la mafia- se quejó

-¿Edgar?, ¿Edgar Allan Poe?, ¿El de Guild?- preguntó Koyo sorprendida

-¿Te gusta Edgar, Rampo-san?- preguntó Kyoka sonriente

-nop, y si fuera así, ¿Qué tendría de malo?- preguntó el mejor detective mientras dejaba los dulces a un lado y miraba a todos con seriedad.

El que dejara los dulces sorprendió a todos pero eso significaba que el azabache se estaba tomando esto en serio.

-pues, no estamos diciendo necesariamente que sea malo- comento Yosano sonriéndole a Rampo- solo pensamos que dado que es un enemigo, podría hacerte daño, pero si tú crees que lo conoces y que no te hará nada, es tu decisión- dijo la doctora mientras que todos a su alrededor asentían.

El detective amante de los dulces se bajó de la mesa en la que estaba y sonrió.

-bueno, digamos que si me gusta Edgar, pero dejémoslo ahí- dijo mientras se acercaba a donde se encontraban Dazai, Chuuya, Atsushi y Akutagawa, quienes miraban y escuchaban toda la conversación sin decir nada-¿tu que piensas, Dazai?, ¿Está bien enamorarse del enemigo?- preguntó mientras veía a Dazai y a Chuuya simultáneamente- ¿Está bien enamorarse del enemigo y no decir nada?

-pues...supongo, que es normal, ¿No?- un Dazai titubeante y nervioso no se veía todos los días, diría que todos estaban sorprendidos pero Rampo no lo estaba, por eso mismo hizo esa pregunta directamente al suicida.

-¿Qué opinas?- preguntó Chuuya a Dazai sorprendiendo a todos- ¿Prefieres odiar a el enemigo, o prefieres amarlo con desenfreno?- preguntó el pelirrojo con un tinte de esperanza y desesperación en su voz

-yo...creo que elijo amar al enemigo- respondió Dazai mirando al mafioso directamente a los ojos

-¿Entonces qué esperas?- susurro Chuuya olvidándose de que todos los demás estaban allí

-una señal, una señal de que soy correspondido- dijo el azabache suicida con el mismo tono de voz

-lo eres- comentó el pelirrojo sonriente ganándose una sonrisa de parte de Dazai.

Todo estaban conmovidos por dicho suceso, sonreían a el par con añoranza y esperanza de que terminaran juntos después de esto, a su vez, Atsushi miro a Akutagawa con una sonrisa y este al darse cuenta de su mirada también lo miró y le sonrió.

El mejor detective decidió que no tenía nada más que hacer ahí y mientras que los otros se dispersan para continuar hablando, él se fue del lugar en busca que quién en realidad, si amaba.

Tres futuras parejas se confesarian está noche.

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•por poco y me olvidó
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