Diez motivos para amarte

Capítulo 4: Chantaje

Sebastián Anderson

—¿Qué mierda fue eso Sebastián?

—Simplemente es una tonta bailarina y ya, tampoco es para tanto.

—Bueno, probablemente arruinaste su presentación y con ella la de mi novia, ¿Estás consciente de que tarde que temprano Julissa te reclamará por esto?—cuestiona Luca con el ceño fruncido.

—Créeme, eso es lo menos que me importa ahora.

Sé que Julissa es un monstruo cuando se enoja o cuando ve una injusticia, no por nada será abogada. Pero claro que la raíz de todo esto no es una injusticia para ella, sino para mí.

—Quiere decir que te importa más cómo reaccionará la bailarina—dice burlón—. Hablando en serio Sebastián ¿Qué te hizo ella? O acaso mi mejor amigo ya encontró el amor de su vida.

—Dios, claro que no—bufo exasperado frunciendo el ceño.— Solo es una odiosa bailarina que sabe cosas de mi que no debería saber y ya.

—Cosas que deben ser bastantes graves para tratar así a una chica—dice mirándome dudoso—. ¿Qué estás ocultando Sebastián?

—No es nada importante. mejor cambiemos el tema—contestó en un gesto desinteresado pero Luca sigue analizándome.

—Fuiste tú ¿verdad?, tú fuiste quien vandalizó la oficina del rector—Creo que mi silencio es una afirmación para él porque sigue hablando.— Ahora lo entiendo, ella te vió y por eso ahora la molestas.

Joder, podría ocultárselo a todo el mundo, pero no a Luca, es un jodido genio que une las piezas de forma tan correcta. No me queda de otra, se lo cuento todo de principio a fin saltando las partes en donde ella me patea o me pisotea.

Luca me mira sorprendido pero a la vez orgulloso, sabe que lo que hice fue a raíz de una injusticia y para ser sincero, no me arrepiento de nada.

—No puedes decir nada de esto ¿bien? ya bastante tengo con la bailarina.

—Descuida, no diré nada pero ¿Julissa sabe de esto?

—No, y por favor, no se te ocurra decirle nada, eso solo lo empeoraría—Luca me ve desconfiado pero al final asiente.

Confió en él, es mi mejor amigo y él sabe cosas peores que estás.

—Bueno, ya debo irme, todavía tengo mucho que hacer para la fiesta de mañana—dice levantándose del sofá y dirigiéndose a la salida de mi casa.

—Si es así de genial como dices, me imagino que aún te queda mucho por organizar.

—Amigo, te aseguro que será la mejor fiesta a la que irás en toda tu vida.

La fiesta de cumpleaños de Luca, lo ha estado mencionando desde meses atrás, será en el antro más famoso de la ciudad y desde que comenzó a organizarla ha dicho que será una fiesta incluso mejor que cuando cumplió diecinueve.

Puede que hayamos acabado su cumpleaños en prisión, pero jamás me cansaré en decir que fue una de las mejores.

Ahora mismo necesito una distracción y puedo estar seguro que la fiesta de mañana es lo que necesito.

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Rebeca Miller

Es domingo por la tarde, y afortunadamente todo ha ido de maravilla, después de dos días terribles y llenos de mala suerte, es bueno tener un poco de descanso, no tengo nada de pendientes por hacer ahora, así que supongo que los planes que tenía el viernes los puedo hacer tranquilamente hoy.