Una Pasión... Un Amor ©

Epílogo

Se alza la victoria, todos celebran con festones, confeti y sus gritos de alegría, la A&M Texas había ganado uno de los partidos más importantes de la temporada, su capitán o sea yo estaba orgulloso de mi equipo, entre exámenes, fiestas y entrenamiento duro habíamos podido superar todas nuestras dificultades, también tenía buenas calificaciones aunque la ingeniería industrial es bastante complicada, me gusta la verdad, me gusta ponerme retos, algo que desde pequeño me gustaba hacer.

Había una gran fiesta en la hermandad de un amigo, decidí ponerme mi mejor ropa y asistir, había estado un poco distraído por los estudios, eso me había impedido conocer señoritas hermosas con quienes salir, llegue en mi campero, me recibieron con un abrazo y todavía se escuchaba algunos fanáticos que celebraban como si acabáramos de ganar. Entre y había chicos tomando tragos a montones, algunos dándose besos y manoseándose como si no fuera mañana, también estaban mis compañeros relatante el juego, agarre una bicha y subí arriba al balcón para apreciar mejor la vista.

???: Gran victoria, sos un gran capitán pero no más grande que yo

Frank: Señorita Rossi, ¿vos qué hace por acá? pensé que no te gustaban las fiestas

Paulina: No me gustan pero el juego estuvo genial, debería hacer una excepción

Frank: ¿Te traigo una bicha?

Paulina: Eso es para minas, yo quiero una botella de ron

Frank: Vos nunca cambiaras

Paulina: Lo se

Bajo hacia la "barra", o bueno la cocina donde están repartiendo alcohol como si fuera billetes de 100 dólares, agarro una botella y subo, me detengo en la puerta donde detallo a Pau, hace un par de años que no la veía, sabía que estaba estudiando en mi misma universidad pero nunca nos llegamos a cruzar. Cortamos en nuestro último año debido a que me iría y no pensé que la volvería a ver. No ha cambiado salvo que se tinturo el pelo de castaño, tiene más cola y bubis, sigue siendo delgada pero un poco fornida por los entrenamientos de cuando éramos chavos.

Frank: *Le doy la botella* Aquí tiene señorita

Paulina: Esta fiesta es aburrida, vayamos a otra parte, estar entre estudiantes borrachos no es mi idea perfecta para un reencuentro

Frank: ¿Vos a dónde quieres ir?

Paulina: ¿Dónde es que vos vives?

Acabo mi bicha y conduzco a casa, mi piso es bastante normal, duermo solo por lo que no me tengo que preocupar por compañeros chismosos de piso. Entramos y nos sentamos en la cama, abrimos la botella y empezamos a tomar. Por la mitad de la botella nos estamos besando y en cuestión de minutos tenemos una fabulosa velada, ¿qué creían? ¿21 años y virgen? no por favor, Pau y yo habíamos tenido varias noches hermosas cuando teníamos 16, yo me escapaba a la casa de ella, su papá ni Robín jamás nos atraparon. Al despertar cerca de las 5 a.m., el sol no ha salido, así que nos vestimos con nuestras misma prendas del día anterior, pero como no tenemos remeras limpias, me coloco la del uniforme y le presto la de repuesto a Pau. Agarramos mi auto y salimos de aquel lugar.

Paramos en un comedor, comemos agradablemente y reímos un poco recordando esas aventuras que vivimos en la época que compartimos juntos. Volvemos al auto y conducimos hasta una parte donde podemos ver la salida del sol, es una parte muy bonita y aunque hace frio, entre nosotros existe un ambiente caliente que es imposible de ignorar. Paramos el auto y nos sentamos sobre el capo.

Frank: La última vez que vi una vista tan bonita, fue esa luna llena en Buenos Aires la noche anterior de la copa

Paulina: Como olvidarlo, desde ese día nunca he vuelto a ser la de antes, gracias a vos *me mira sonriente*

Frank: Sigues siendo el ser más hermoso que he visto sobre la tierra, serás morena pero nunca te olvidare como pelirroja

Paulina: Son buenos los cambios, ¿y tu novia?

Frank: Terminamos hace un año, la boluda me fue infiel con su vecino

Paulina: Lo lamento

Frank: Tranquila, ¿y tu novio?

Paulina: No tengo, creo que realmente no le quería y por eso lo deje

Frank: Lo lamento, el pasado es el pasado, es bueno que continúes

Paulina: Para mí no, yo todavía te quiero

Frank: ¿Posta?

Paulina: Incluso creo que te amo

Frank: Yo también te amo Pau, desde hace 7 años que lo hago, nunca te deje de pensar, jamás saldrás de mi porque hay algo que nos une

Paulina: Yo tampoco te deje de pensar ni de amar, sos la mejor persona que ha llegado a mi vida sin que yo lo hubiera visto venir

Frank: Paulina

Paulina: ¿Si?

Frank: ¿Te casarías conmigo?

Paulina: Si *me besa con pasión*

Frank: ¿Cuando? ¿Dónde? y ¿Cuantos hijos quieres?

Paulina: Hoy en Las Vegas, quiero dos hijos pero en este momento no quiero embarazarme, quiero practicar pero no tener un bebé, déjame graduarme

Frank: Esta bien *la miro directamente a los ojos* te amo

Paulina: Y yo a ti