Ella es mía

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La boxeadora trago saliva ante lo que dijo la peliazul.

-Tranquila, no tengo esas intenciones, yo soy heterosexual...creo.-Dijo Odori con cierto nerviosismo.

-¿Crees?, eso no se cree, se siente.

-Lo se pero es que eres tan linda...-Dijo la boxeadora mientras tomaba a la peliazul de la cintura.

La peliazul se quedo con cara de shock, Odori al ver su reacción la soltó.

-Era broma, no me metería con la novia de mi mejor amiga, es mas probable que me meta con Merry que contigo, sin ofender.

-Inténtalo y te mato.

-Uy, perdón, uno ya no puede bromea bien, se nota que la amas.

-Cállate.

Merry salió del baño y continuaron charlando, Merry se veía bastante alegre, pasaron algunas horas después y Odori tuvo que irse, Merry se quedo como cuando un dueño deja a su perrito para ir a trabajar. 

-Ya, ya, tuvo sus razones para irse pero aquí estoy yo.

-Ya lo se pero tenía mucho tiempo sin verla.

-Si te beso, ¿te sentirás mejor?.

-Probablemente.

-Bueno, hay que intentar, ¿no?.

Ambas chicas compartieron un suave beso, era lo único que importaba. Merry estaba muy enamorada de Naima, quería salir a la calle y gritar cuanto la amaba, pero no podía, si la empresa en la que trabajaba Naima no fuera homofóbica, las cosas serían muy diferentes.

Solo míaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora