-Algo en ella me hace palpitar fuerte mi corazón. Es raro en mi
-¿Cuando será el día en que deje de ser rara?
Alex Musso, toda su vida la vive en un orfanato en la cual nadie la comprendía y más bien se burlaban de ella hasta que vino una luz de esp...
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ERA UNA MAÑANA muy tranquila, los pájaros cantaban, la gente rica hablaba de sus riquezas de forma egocéntrica y muy innecesaria, en ese ambiente, en uno de los cuartos de él hotel cinco estrellas se encontraban un dúo empacando para su futuro viaje
—Alex: Apúrate! Tenemos que llegar 3 horas antes del vuelo para los papeles
—Gojo: cinco minutos más—Dijo de forma haragana, aquel albino no quería levantarse de su cama lo peor es que su amiga ya se encontraba lista y solo faltaba la levantada de él para irse al aeropuerto
—Alex: tu lo pediste—Ella tiró la sábana que ocupaba el mayor para acurrucarse y cubrirse y rápidamente se abrió el cajón de al lado y sacó el teléfono de esté para después salir disparada a la terraza.
Gojo al ver tremenda acción se levantó con rapidez y de ese mismo ritmo fue por su celular.
—Gojo: devuélveme mi celular!— Exclamó molesto
Esté solo recibió una pequeña risita burlona de su compañera
—Alex: Jejeje tómalo—la peli roja le tiró el celular y este lo agarró perfectamente
Salieron del hotel, Gojo entrego las llaves a la recepcionista sin antes coquetear le un poco
—Alex: Vámonos! Ya quiero irme— Gritó ella insistente, se encontraba en un sofá de decorado muy lindo de el lobby del hijo. Parecía como una hija rogándole a su padre ya irse
El albino solo gruñó ante esto junto a un suspiró pesado, guiño de forma picardía a la muchacha de la recepción y fue a donde la peli roja estaba sentada, suspiró nuevamente mientras agarraba las maletas, la chica repetía la misma acción. Se fueron del lugar, Gojo estaba algo confundido, no sabía muy bien como llegar en taxi aquí hasta el aeropuerto, claramente esto era debido a su desconocimiento del tercer mundo en un país extranjero y muy lejos del suyo
—Gojo: tú sabes cómo llegar en taxi aquí?—le preguntó a la chica y está rápidamente negó
—Alex: No lo sé, nunca he salido a la calle
Satoru miró a un señor alzando su mano fuera de la cera y rápidamente, lo que creía que era un taxi por su físico se detuvo y el muchacho se metió al vehículo. Imitó tal acción y dentro de segundos un taxi se detuvo frente a él
—Gojo: Al aeropuerto por favor— Bajo su brazo y se agachó un poco para ver la cara del conductor desde la ventana que estaba baja
