Cap 11

392 35 2
                                    


Basta!-grité con todas mis fuerzas intentando escapar de sus malditos brazos que me tenían sujeta y pegada a él.

Muzan kibutsuji,te odio!-jadeé conteniendo mi llanto mientras el solo veía con sus ojos frios color camín mi refinado rostro,detallandolo a su antojo y expresando una sutil y escalofriante sonrisa sobre sus labios.

Aguanta solo un poco más,querida....-susurró genuino sobre mi cuello presionando más su agarre,ejerciendo una fuerte presión uniendo más nuestros cuerpos.

M-Me d-duele....-gemí bajo haciendo que este besara casualmente mi clavícula hasta lograr separarse de mi saboreando mi sangre como cualquier demonio haría con su presa,dejándome estática en mi lugar mientras prufundizaba con una penetrante mirada a través de mi, mandando descargas electrica por todo mi cuerpo.

Maldito dominio!-maldije casi escupiendolo con ira haciendo reír divertido al mismísimo rey de los demonios que ahora juntaba su rostro al mío  para simplemente suspirar sobre el.

No sabes lo que este demonio seria capaz de hacer por ti,cariño...-dijo persuasivo y malicioso,con hambre sobre sus ojos rojos intenso y ardientes,que miraban mi ser,mientras de mi parte solo ganaba un sonoro jadeo ahogado,haciendo a este sonreír casi rozando sus labios con los míos.

Te acostumbraras a mi....con el tiempo-tocó suavemente mi cara sin llegar a dañarla con sus garras afiladas que ahora estaban teñidas de un rojo carmesí por mi sangre.

Te dejaré ir por esta vez mi amada flor....-comenzó a decir entre suspiros como si le costara soltar un tesoro.

No quiero quitarte la vida...

No aún...-volvió a susurrar pero esta vez con su ardiente y seductora mirada en mi,como si de un depredador se tratara,dejándome congelada allí,tras sus palabras que habían sido clavadas como dagas sobre mi piel.

Como la espada de un cazador que todo demonio teme ver...

Sayuri...-demandó con su ronca y fría voz mientras me escaneaba una y otra vez.

Ten claro una cosa,tu eres mia!

Mi mujer!

Me perteneces!

Y no dejaré que ellos te arrebaten de mis manos...-termino susurrando lo último mientras me abrazaba a su torso y hacia sonar el biwa,encontrándonos con el resto de las lunas superiores en aquella escalofriante dimensión.

Te iras con Douma,Kokushibo y Akaza,mi tres mejores lunas.....no quiero problemas Sayuri....

Y no dudaré en matar a todo aquel que se cruce en tu camino,pequeña....-siguió diciendo relamiendo sus labios retador, mientras manipulaba mi cuerpo tembloroso sobre el lugar,sin pasar desapercibida para ningun demonio,que estaba atento a mi.

Yo examinaré tu sangre,hasta ese entonces,ellos estarán a cargo de ti,mientras el resto de mis lunas extermina a cualquier pilar que se encuentre y sea un problema para que tu seas toda mía....-rió lo último causandome escalofríos,haciendo sonar de nuevo el biwa  transportandome junto a las tres lunas superiores,a un pequeño pueblo aislado,viejo y desierto,donde pude visualizar una antigua casa en ruinas haciendo que esos malos momentos que quise olvidar,volvieran a mi,haciendo que recordara mi pasado lleno de recuerdos dolorosos que venían una y otra vez como si de cuchillos se tratase,haciendo que temblara todo mi cuerpo,queriendo huir se allí.

Ni se te ocurra escapar....-susurró sobre mi espalda Kokushibo haciendo notar su pelo largo mientras yo estaba tensa y en trance,buscando alguna forma de escapar de ese lugar.

Por favor,no!

No otra vez...

Pensaba mientras sentía como Kokushibo desaparecia y me abrazaba Douma entre risas.

Hyahh!!

Por fin solos,pequeña humana...-rió sosteniendo mi cintura con fuerza haciéndose notar y que lo fulminase con la mirada.

Hyahh!!!-volvió a chillar como un adolescente alocado y hormonado haciendo que me quejara sobre sus brazos.

Tienes una hermosa mirada...-canturreó tocando sutil mi mejilla aproximando su rostro al mío,haciendo que ardiera en ira.

Muereté!-escupí firme ganandome una risa varonil y escalofriante de su parte

Se divirtió con el señor Muzan?-intervino Akaza ronco,que hasta el momento se mantenia oculto tras las sombras.

Oh!

Quiere decir que ya es mi turno,amigo Akaza!?-dijo Douma inocente mientras apretaba más demandante su agarre en mi cintura,posesivo,sobre mi carne,casi traspasando el kimono,logrando alterar al demonio pelirrojo que rápidamente me sacaba de esos fuertes brazos,para notar mi temblor,mientras el gruñia.

No temas,mujer!-susurró oliendo mi cuello y lamiendolo en el proceso,haciendo que mi pulso se acelerase a mil.

Yo te protegeré...-susurró seguro mientras clavaba sus colmillos traspasando mi piel,haciendo salir mi sangre  en pequeñas gotas que ardían y quemaban sobre todo mi cuerpo,para transportarme de nuevo a la oscuridad.

Me había desmayado en sus brazos,sintiendo como se alimentaba de mi.

Ojalá no despierte nunca...-pensé finalmente cerrando mis ojos,cayendo en la nada.














El lirio azul (Kimetsu no yaiba x tn)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora