Aquel día...
"P-pero, Kim Taehyung, ¡eres un inepto!" - gritó la mujer al otro lado del teléfono. El castaño, empapado bajo la intensa lluvia, apretaba el móvil con fuerza mientras sus manos temblaban. "Este es el quinto trabajo que pierdes. ¿No te das cuenta de que te despiden porque eres un Omega distraído? ¡Rayos, realmente eres una decepción, no solo como persona sino también como hijo! Si hubiera sabido que serías alguien tan patético, nunca te habría tenido..."
"Mamá..." - susurró Taehyung, con la voz quebrada.
"¡Nada de mamá!" - interrumpió la voz con furia. "Desde ahora ya no soy tu madre. Aprende de Jennie, tu hermana acaba de comprometerse con un buen Alfa. Ella es hermosa, inteligente, y estudió en un instituto prestigioso. No se compara contigo... un simple Omega desempleado. Me avergüenzo de ti. No me vuelvas a llamar a menos que sea algo importante." Y con eso, la llamada se cortó, dejando a Taehyung desolado y con lágrimas inundando su rostro.
Taehyung se quedó allí, bajo la lluvia, sintiendo el peso de las palabras de su madre aplastándolo. El frío y la humedad se mezclaban con la tristeza y la desesperación que sentía. Su mundo se había derrumbado una vez más, y ahora, sin el apoyo de su familia, se sentía más solo que nunca.
La vida de Taehyung realmente era triste.
Todo comenzó a sus veinte años, cuando decidió abandonar su carrera en economía. No era una carrera que amara; creía que al dejarla podría encontrar algo que realmente le apasionara. Sin embargo, nunca encontró su verdadera vocación. Mirando hacia atrás, ahora veía esa decisión como un grave error, una decisión impulsiva de juventud.
Cuando trató de retomar sus estudios, sus padres le dieron la espalda, negándose a apoyarlo. "Eso te pasa por ser un estúpido", le dijo su padre. A partir de ese momento, Taehyung tuvo que buscar trabajo si quería seguir con su carrera. Cosa que nunca paso. A los veintitrés años, sus padres le dieron un ultimátum para que se fuera de casa. Encontró un pequeño departamento, su refugio, aunque muy precario. Con el tiempo, consiguió un empleo mediocre que apenas le permitía mantenerse. Pero ahora, sin trabajo, temía que lo expulsaran del único lugar que podía llamar hogar.
No había escapatoria: Taehyung era un omega sin trabajo, y su familia lo despreciaba. Vivía en la pobreza, y además, sin las posibilidades de tener a alguien a su lado, pues el Omega no poseía la belleza que solían buscar los alfas. Su cabello castaño sin brillo, los granos que marcaban su rostro y los kilos de más no eran precisamente atractivos en la actualidad. Para ser sincero, Taehyung nunca había tenido suerte con los alfas, y mucho menos en el amor.
Algo que Taehyung deseaba profundamente era formar una familia con alguien especial. Soñaba con tener hijos, un perrito, un esposo que lo amara, y un hogar cálido. Sin embargo, en su condición actual, esos sueños parecían imposibles de alcanzar.
"Debo regresar a casa", pensó el omega, secando sus lágrimas con la manga de su chaqueta. Sin embargo, justo antes de irse, escuchó algo caer. Desde lejos, pudo ver cómo varios hombres salían de un carro negro y tiraban una bolsa negra al suelo. Taehyung habría seguido su camino, ignorando el incidente, de no ser por el hecho de que, pocos minutos después de que los hombres se fueran, escuchó un fuerte maullido proveniente de la bolsa.
Un gato...
Taehyung se acercó lentamente, tomó la bolsa y la abrió con cautela. Dentro, encontró un gato lastimado, cubierto de moretones, su cuerpo temblaba débilmente, y sus ojos reflejaban un dolor profundo. El pobre animal parecía estar en sus últimos momentos de vida.
No sintió lástima al verlo; en cambio, se sintió identificado con ese gato. Una profunda empatía por el gatito negro lo invadió, como si estuviera mirando un espejo de su propia existencia.
"A ti también te echaron, ¿verdad? ¿Tu familia también te abandonó?" murmuró Taehyung con tristeza, acariciando suavemente al gato herido. "Te entiendo, pequeño. Sé lo que se siente ser despreciado y abandonado por aquellos que se supone deben amarte. Pero no te preocupes. De ahora en adelante, yo seré tu familia. No estarás solo nunca más, te lo prometo."
Taehyung envolvió al gatito con su chaqueta, protegiéndolo del frío y la lluvia, mientras comenzaba su lento regreso a casa. Aunque sus propios problemas no habían desaparecido, sentía un renovado sentido de propósito. Había encontrado a alguien que lo necesitaba.
"Han pasado tres días desde la desaparición del joven Jeon y aún no se han encontrado pistas sobre su paradero. La familia ha prometido ofrecer una recompensa de tres millones de dólares a quien brinde información valiosa que conduzca a la localización del desaparecido..."
🌟
No olviden de votar y dejar un comentario ❣️
Los capítulos serán semanales❣️
ESTÁS LEYENDO
El gato negro | KOOKV
FanficTaehyung, un tímido omega de veinticuatro años, se encontró de camino a su departamento con un gato negro herido, al borde de la muerte. Quién iba a imaginar que ese indefenso animal cambiaría su vida para siempre, dandole un giro inesperado. 🌟 His...