capítulo 18

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Pov.narrador

La noche cubria a la aldea con su manto de oscuridad y la luz de la luna la iluminaba, dentro de la aldea comercios,bares,casas,y calles se veian iluminadas , las personas pasaban por ellas o se adentraban a tomar y relajarse o simlemente caminaban. Era una noche tranquila como las otras,nada interesante a destacarse, en la torre hokage se veia solo a shiruzen sarutobi entre unas montañas de papeles en su oficina, El anciano sacaba lagrimas por tanto papeleo,pero bueno, nada fuera de lo común.
En el area de clanes, vemos al distrito uchiha tranquilo ,en la casa del patriarca se veian a el y su familia comiendo,nada fuera de lo común, nos dirigimos a la casa Namikaze-uzumaki donde se los ve felizes mientras comen,con charlas entre el relampago amarillo y el habanero sangriento sobre su día, nada fuera de lo común, ahora vemos con un chico peliplata leyéndo iha iha en su habitacion solo . Nada fuera de la común, nos vamos a el cuartel de raiz, alli entre la oscuridad de la oficina de danzo shimura se lo veia con una foto enmarcada en sus manos, en ella se veia la imagen del prodigio uchiha shisui uchiha ,con unos informes y informacion sobre el uchiha esparcidos en la mesa, unas hojas estaban marcadas con rojo destacando a las personas en esos informes, danzo veia solo las ojos del chico con avaricia acariciandolos despacio, bueno parecía envez un chica obsecionada asi, pero bueno, nada fuera de lo común.
Ahora nos dirigimos a un escondite en una ubicación desconocida, alli se encontraba el legendario sennin de las serpientes Orochimaru, haciendo sus experimentos ilegales como todo un científico loco, el sigue igual, no cambia la serpiente travesti no cambia.
Ahora nos dirigimos al bosque de konoha cerca de las afueras del pais del fuego, dentro de una cueva se hallaba Aoi con una capa negra y mascara de gato, paró de caminar saco una libreta escribiendo un informe sobre la cueva, termino y se fue a la salida. Llego a otra cueva mas e iso lo mismo que en la otra, y asi hasta que encontro una montaña con una avertura casi inperseptible de ver, se adentro en ella y camino hasta que encontro un lugar mas abierto, recorrio todo el lugar anotandolo como las demas , el luagar era espacioso y grande;como un galpón. Termino y se fue, llego a la entrada de la aldea y se dirigio a un pasaje secreto que habia hecho en el territorio de clanes, llego al orfanato y entro por la ventana de su habitación-que la abia dejado abierta- dejo sus cosas en cama y se cambio de ropa, comenzo a ver sus anotaciones sobre la ubicación de las cuevas y con un mapa de las tierras del fuego comenzo a tachar y remarcar los luagres útiles que podria usar.

-mmmm, la cueva de la montaña del Norte podria ser el escondite perfecto, solo tendria que abastecarla con recursos basicos y comenzar a construir unas cabañas, tomarian unos meses hacerlas mmm, seran pocas pero serviran.- comenzo a anotar en la libreta.

Y asi siguio hasta las 2 de la mañana, guardo todo en un pergamino de almacenamiento y se fue a dormir.


A LA MAÑANA SIGUIENTE :

Un nuevo dia para la aldea y otro nuevo dia de clases en la academia, pero este era uno especial hoy se arian los examenes chunin para el siclo superior. Aoi caminaba tranquila hacia la ecademia sin prisa anoche no pudo dormir por estar recoriendo los alrededores para encontrar los posibles escondites que sirvieran, le habia tomado unos dias recorer todo el territorio para eso, pero al fin lo habia encontrado y se sentia satisfecha, el no dormir le caia muy mal. Llego a la Academia Entro al salon y se fue a su asiento, podria aver dejado a un clon venir pero estaba tan cansada que dudaba que dure toda la clase, se quedo mirando la ventana esperando a que su sensei llegara, sus ojos querian cerrarse por el cansansio y el sueño que tenia. Un rato después llegó el sensei y comenzó la clase, era una de las mas aburridas que tenía qué soportar,hasta las clase de matemática de su otro mundo era mas entretenidas que esta, y asi pasarían unas horas hasta el timbre del reseso.

Pov. Aoi

Cuándo escuché el timbre me levanté de mi asiento y me fui a buscar un lugar en donde dormir. Recorrí cómo podía hasta decidirme dormir en la terraza, caminé por las paredes y llegué a mi destinó me acosté mirando el cielo azul y me puse a pensar un poco.

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