Una galaxia pervertida, muy, muy lejana

#32 Batalla por Geonosis, parte 2

#32 Batalla por Geonosis, parte 2

"... Tienes razón, por supuesto. ¡Piloto! ¡Estamos cambiando el rumbo! ¡Por ahí!"

El clon que pilotea su cañonera sigue inmediatamente las órdenes y dirige la nave hacia una nueva dirección. Específicamente, hacia la dirección en la que Tylo puede sentir su sable de luz, incluso ahora. Es cierto que había sido algo consciente de ello desde que llegó a Geonosis, pero no había tenido exactamente la intención de priorizarlo sobre cosas como asegurarse de que Aayla, Annie y la senadora Amidala estuvieran bien. Ah, y el Maestro Kenobi, pero él podía cuidar de sí mismo...

De todas formas, el Maestro Secura tenía razón. Este antiguo Maestro Jedi, el Conde Dooku, casi con toda seguridad estaba en complicidad con los Sith. Toda esta situación era una especie de trampa. Tenían que tener cuidado, pero lo más importante de todo era que tenían que ponerse en el lugar que mejor les convenía para influir en el resultado no solo de ESTA batalla, sino de todas las batallas que probablemente vendrían.

Janga Fett era un elemento clave y Tylo se sentía avergonzado por no haberse dado cuenta de eso antes. Supuso que había una razón por la que Aayla era la Maestra y él seguía siendo el Aprendiz Padawan.

De todos modos, bajo su guía, su LAAT pronto llega a un hangar apartado al costado de la arena original en la que habían encontrado a la fuerza de ataque Jedi luchando dentro. Aterrizando afuera detrás de un afloramiento, Tylo duda cuando ve a Bo-Katan revisando sus armas en preparación para ir con ellos. Aayla también se da cuenta de esto y lo mira fijamente, claramente no demasiado entusiasmada por traer a un mandaloriano con ellos para detener a otro mandaloriano.

No puede ser que esté hablando en serio. Ella es una mercenaria, pero hasta los cazarrecompensas tienen lealtad...

Aayla podría tener razón, pero gracias a su don, también puede escuchar los pensamientos internos de Bo-Katan, y estos no gritan que está a punto de traicionarlos, incluso si están algo en conflicto.

Maldita sea, Fett. No sé en qué te has metido. Espero que tú y el chico ya os hayáis ido. Pero si no... haré todo lo posible para asegurarme de que os atrapen con vida. Pero no voy a dejar que arruines algo bueno que podría tener aquí...

De alguna manera, había logrado asegurarse la lealtad de Bo-Katan en un período de tiempo sorprendentemente corto. ¿Eran realmente tan buenas las folladas que le había dado? Supuso que debían serlo. Le habían permitido follar tontamente con Maestros Jedi más de unas cuantas veces, y Bo-Katan, por muy ruda que fuera, no era una Maestra Jedi. En realidad, no tenía ningún tipo de defensa contra las folladas mejoradas por la Fuerza que le había estado dando.

De todos modos, cuando Bo-Katan y Aayla lo miran expectantes, Tylo toma la decisión y solo puede esperar que sea la correcta.

"Soldados, quédense aquí y vigilen la entrada. Kryze, estás con el Caballero Secura y conmigo".

Es una señal reveladora de la relación entre él y Aayla que incluso él pueda salirse con la suya. Aun así, Bo-Katan no parece inclinada a cuestionarlo, simplemente se endereza y asiente con la cabeza desde debajo de su casco de beskar. Aayla, mientras tanto, frunce los labios antes de inclinar ligeramente su propia cabeza en reconocimiento de la decisión de Tylo.