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A pesar del anuncio de HYBE y de haber acordado no interactuar, claramente luego de aquel beso el no verse era imposible. Aunque más imposible era verse sin que los ejecutivos se enterasen.

Además de verse de vez en cuando en los pasillos de la empresa o cuando coincidían en los shows musicales, Joshua e Inha empezaron a encontrar formas ingeniosas de comunicarse y verse en secreto.

Utilizaban mensajes codificados en sus redes sociales, compartiendo pequeños detalles que solo ellos entenderían, y aprovechaban cada oportunidad para estar juntos, aunque fuera por breves momentos.

Una noche, después de un largo día de ensayos, Joshua e Inha se encontraron en una pequeña sala de prácticas que sabían que rara vez se usaba a esa hora.

Inha había llegado primero, y estaba mirando su teléfono cuando Joshua entró silenciosamente, cerrando la puerta detrás de él.

—Pensé que no llegarías —dijo ella con una sonrisa, levantándose para acercarse a él. Joshua la atrajo hacia sí, envolviéndola en un abrazo.

—Nunca me perdería esto —respondió, su voz baja y cálida.

Se sentaron en el suelo, apoyados contra el espejo, disfrutando de la tranquilidad del momento.

Joshua tomó la mano de Inha, entrelazando sus dedos.

—¿Cómo has estado? —preguntó, mirándola con preocupación. Inha suspiró, apoyando su cabeza en su hombro.

—Ha sido difícil. Me gustaría que pudiésemos vernos en lugares públicos —dijo con un tono triste mientras jugaba con sus manos nerviosamente.

Joshua asintió, entendiendo perfectamente.

Se quedaron en silencio por un momento, disfrutando de la compañía mutua.

Joshua acarició suavemente el cabello de Inha, y ella cerró los ojos, sintiéndose en paz por primera vez en días.

—He estado pensando —dijo Joshua finalmente, rompiendo el silencio—. Tal vez deberíamos hablar con los ejecutivos otra vez. Explicarles que esto es más serio de lo que pensaban. Quizás puedan entender y encontrar una solución. Inha levantó la cabeza para mirarlo.

—¿Crees que funcionaría?—cuestionó con timidez—, no quiero que hagamos una estupidez.

Joshua le dio un pequeño beso en la frente.—Llevamos dos meses así, Inha. No quiero que sigamos viviendo en secreto.
Merecemos ser felices sin tener que escondernos —le dijo y la muchacha asintió.

—No puedo creer que todo surgió porque comentaste una de mis publicaciones, es lo menos romántico del mundo —explicó Inha entre risas.

—¿Quieres saber por qué lo hice? —preguntó e Inha nuevamente asintió—. He querido hablar contigo desde que te conocí, que fue el día de tu debut. Vestías un lindo vestido rosa y te vi antes de que entrases al escenario. En tus ojos vi un brillo que me conmocionó, me dedicaste una sonrisa hermosa y desde ahí supe que eras una persona increíble.

Inha sonrió, sus ojos brillando con emoción y ternura mientras recordaba ese momento.

—No sabía qué significaba tanto para ti —dijo suavemente, apretando la mano de Joshua.

Joshua la miró con una sonrisa cálida.—Realmente significas mucho para mí, Inha. Y creo que ya es hora de que dejemos de esconderlo —Inha asintió, su determinación iba creciendo junto con la de Joshua.

—De acuerdo. Hablaremos con los ejecutivos y les diremos la verdad —ambos se dieron un último abrazo antes de despedirse.

Al día siguiente, Joshua e Inha se dirigieron juntos a las oficinas de HYBE, decididos a enfrentarse a los ejecutivos.

La tensión era palpable mientras esperaban en la sala de reuniones, pero se sentían más fuertes sabiendo que se tenían el uno al otro.

Finalmente, los ejecutivos entraron, acompañados por los managers de ambos. La mujer que había estado al mando la última vez los miró con una mezcla de curiosidad y preocupación.

—Joshua, Inha, ¿a qué debemos esta reunión? —preguntó, tomando asiento frente a ellos. Joshua tomó la mano de Inha y dio un paso adelante.

—Queremos ser honestos con ustedes. Desde que se emitió el comunicado, hemos estado viéndonos a escondidas. Esto no es solo un rumor o un malentendido. Queremos estar juntos sin tener que ocultarlo.

La habitación quedó en silencio por un momento. Los ejecutivos intercambiaron miradas y sus managers parecían sorprendidos, pero nadie dijo nada inmediatamente. Finalmente, la mujer al mando suspiró.

—Entendemos que esto es difícil para ustedes. La industria del entretenimiento no es fácil, especialmente cuando se trata de relaciones personales. Pero también debemos considerar la imagen pública y las carreras de ambos.

Inha, con firmeza, intervino. —Lo entendemos. No estamos pidiendo que hagan un anuncio público sobre nuestra relación. Solo queremos que nos permitan vivir nuestra vida sin tener que escondernos constantemente. Podemos manejar los rumores y las preguntas de los fans, pero necesitamos su apoyo.

Los ejecutivos comenzaron a murmurar entre ellos, evaluando la situación. Después de unos momentos, la mujer al mando volvió a hablar.

—Podemos considerar su petición, pero con ciertas condiciones. Deben ser discretos y cuidadosos. Si los rumores se salen de control, tendremos que reevaluar la situación. Joshua e Inha se miraron, sintiendo una chispa de esperanza.

—Aceptamos esas condiciones —dijo Joshua firmemente.

La mujer asintió.
—Muy bien, confiaremos en ustedes. Pero recuerden, esto es un compromiso. No solo con nosotros, sino también con sus fans y con ustedes mismos.

Joshua e Inha asintieron, sintiendo que habían dado un paso importante. Mientras salían de la sala de reuniones, se miraron con una sonrisa cómplice.

—Lo logramos —dijo Inha, con su voz llena de alivio. Joshua apretó su mano con firmeza y se acercó a ella, deslizando su mano por su cintura y atrayéndola hacia él.

Inha sintió un escalofrío recorrer su espalda mientras sus manos se apoyaban en el pecho de Joshua. Sus ojos se encontraron y finalmente sellaron el momento con un beso. 

⋆.˚INSTAGRAM II  |JOSHUA| ; seventeen ๋࣭⭑ 「COMPLETA」Donde viven las historias. Descúbrelo ahora