Fructus

Capitulo 19.

Oscuridad, infinitamente oscuridad, una vez estaba en ese raro sueño o ¿No era un sueño? Se sentía despierto y podía sentir cada pequeño gramo de su cuerpo. Miraba a los lados en búsqueda de poder ver algo, pero solo había infinito negro donde quiera que vea, pero incluso en esa oscuridad absoluta podía ver su cuerpo, pero sin ninguna fuente de luz. Camino por el inexistente suelo por ese mundo oscuro, buscando una inexistente salida en ese infinito negro, pero su búsqueda de la salida se fue interrumpida cuando vio algo o mejor dicho una criatura gigantesca.

Una enorme y largo cuerpo escamoso de escamas azules con celeste, que se sumergía en el inexiste suelo junto al  inexistente techo, aunque podía ver el inició viendo la cola del animal que se movía entre esa infinita oscuridad. Izuku sintió un escalofrío recorrer su cuerpo al sentir un aire caliente venir detrás de el, haciendo que lentamente empezó a voltear para toparse con esa enorme fila de dientes de la cabeza del dragón. Dio unos pasos hacia atrás antes de caer al suelo sintiendo un enorme temor combinado con sorpresa al ver al enorme dragón occidental, que lo observaba con esos ojos rasgados como los de un depredador.

– Despierta.

Izuku abrió los ojos lentamente topándose con el blanco techo de la habitación del hospital, antes de levantarse mientras sus escamas volvían a surgir junto a su crecimiento muscular, antes de sentarse en la camilla asustado con la guardia en alto. Observo la habitación, miro a la derecha y a la izquierda, no entendiendo que había pasado o como llego a ese lugar. Se tomó la cabeza iniciando a recordar que había pasado antes de caer inconsciente.

Sudo apenas recordó esa sed de sangre del asesino de héroes, la fuerza de voluntad de ese hombre simplemente fue espeluznante y aterrador, simplemente verlo en ese estado, no pudo evitar compararlo con All Might, no por la fuerza, ni el aspecto, si no la fuerza de su ideal, era tan fuerte como la fuerza del ideal del mismísimo símbolo de la paz. Daba miedo, simplemente recordar esa sensación de terror hacía que su Quirk involuntariamente de active.

– Vaya, ya estás despierto. – Comento una enfermera, que estaba revisando el lugar. – Dime, ¿Cómo te sientes? ¿Te duele algo? – Le pregunto al pecoso.

– Solo me duele, el lado izquierdo del pecho y un poco de dolor en el cuerpo. – Respondió el pecoso para mirar sus manos, le dolían levemente, seguramente el resultado por chocar puños contra Stain, pese a que sus guantes recibieron más el impacto de los golpes.

Izuku observo la habitación notando la presencia de Kendo y Iida, ambos acostados en su respectiva camilla con sus heridas. Estaban dormidos algo que le daba alivió a Izuku, pues después de ser salvado por Stain del Nomu y de escuchar su monólogo, el quedó inconsciente. Pese a la petición de la enfermera de quedarse en camilla se levantó, aunque al hacerlo sintió el dolor generado por el combate con una mayor intensidad. Cayó al suelo para levantarse y salir a dar un paseo por los pasillos del hospital en plena noche o madrugada.

El dolor disminuía con cada paso hasta sentirse sin dolores, a excepción del lado izquierdo del pecho, seguramente tenia una fisura o en el peor de los casos, una costilla rota, pero aún así podía aguantarlo. Camino antes de pararse frente a una de las ventanas del hospital observando como el oscuro cielo, era iluminado lentamente por la llegada del sol, dando así a los primeros rayos del alba del día. Izuku, suspiro, sentía frustración por el mismo, no recordaba mucho de la pelea contra Stain porque cayó inconsciente, podía sentir frustración porque su Quirk tubo que hacer todo el trabajo por el.

– ¿Pudiste dormir, Midoriya?

Izuku salió de sus pensamientos para mirar a Kendo, sentada en su camilla, mirando al pecoso, antes de que el mirará hacía el lado y viera a Iida sentado en su camilla con los brazos vendados. Según recordaba de la enfermera, le explicó que Kendo tenía unas dos a tres costillas rotas por el combate contra Stain y Iida tenía posiblemente los nervios de sus brazos dañados, pero solo era una posibilidad según escucho, aún no sabía si el doctor pudo confirmarle a Iida cuando lo visito.