~Massimo~
Masajeo mi sien con fastidio, últimamente muchas cosas se están saliendo de mi control y es algo que me mantiene estresado la mayor parte del tiempo.
Solo hay una cosa que me alegra en medio de mi propio caos, por lo que tomo mi móvil marcando el número que contesta de inmediato.
— Buenos días señor — saludó.
Evito rodar los ojos, conteniéndome solo para recibir la información que me pondrá de buen humor.
— Dime que conseguiste — exijo ansioso.
— En su rutina diaria todo normal, lo único fuera de lugar es la visita de la familia Santis. Será esta noche, al parecer es una cena de compromiso.
Estoy tenso.
— ¿Compromiso entre quien? — inquiero frunciendo el ceño, espero que no me confirme lo que estoy pensando.
— Connor Mancini y la menor de los Santis.
Suelto un suspiro aliviado, estuve a punto de enloquecer. Alzó una ceja cuando lo oigo murmurar con otra persona.
— Creo que hay algo que debe saber también, me lo acaban de informar — el miedo en su voz me pone alerta, eso significa que me tiene noticias que no van a gustarme.
— Habla de una buena vez.
— La han vendido.
El mundo a mi alrededor parece desaparecer, mi visión se torna roja y mi respiración se descontrola. Sin embargo, mi voz sale baja cuando hablo.
— ¿Qué carajo estás diciendo?
— Me tome la tarea de investigar a fondo el por que de la reunión familiar, el primogénito Mancini anunciara su compromiso y a su vez, Jackson Santis se llevará a la señorita.
Suelto una risa seca.
— Sobre mi cadáver.
— Lo se señor, pero hay más. A raíz de esto me he puesto a investigar más a fondo al señor Mancini y el informe de mis hombres ha sido muy detallado.
Lo escucho leer dicho informe, con cada palabra que sale de su boca mi cuerpo se tensa mas y mas. Mi mente trabaja a toda velocidad, pienso en muchas cosas pero todas me llevan a la misma conclusión.
— Gracias a dios investigue a ese hombre y hemos descubierto la verdad.
— ¿Quieres que te aplauda o que mierda? — siseo con furia, si antes pensaba que esto era lo único que seguía marchando correctamente ahora me doy cuenta de que me están jodiendo por todos lados — Tu trabajo era vigilarla, cuidarla, ¿Y qué demonios has hecho? Dejar que las cosas hayan llegado a este jodido punto.
— Sé que le he fallado — balbuceó nervioso — Pero le juro que acatare cualquier cosa que ordene y no fallare nuevamente. Lo juro.
— ¿Crees que volveré a dejar su seguridad en tus manos? Yo me encargaré personalmente de esto, tu ineptitud me enerva.
— Señor... — intenta hablar para arreglar lo que ya ha dañado.
— No me interesa oir nada de lo...
Se atreve a interrumpirme.
— Le tengo otra información, le juro que esto cambiará todo.
— Te quiero en mi oficina en media hora, si me dices algo relevante tal vez te perdoné la vida — miento, está sentenciado irremediablemente.
— Le aseguro que vale la pena totalmente, iré inmediatamente.
Cuelgo sintiéndome peor de lo que estaba antes de realizar la llamada, son demasiadas cosas las que tengo que procesar, pero no hay tiempo para eso, cada segundo que gasto en buscar una solución es peor para ella, por lo que mandó a llamar a las dos personas de mi entera confianza.
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Efimero
RomanceDos almas atormentadas son indefensas separadas, pero cuando se juntan pueden crear así una combinación explosiva. Para bien o para mal, esas almas se pertenecen. Son muy diferentes. Una es calma, la otra es tormenta. Una es paz, la otra es guerra...