Bonita | Ovidio Guzmán

04

Hanna S. Llerena

- ¿Ya casi? -

- Ya cállate un rato Hanna, todos tenemos hambre - Estaban haciendo hamburguesas al carbón, ya estaban todos despiertos y teníamos mucha hambre

- Pinche culero y páguenme hijos de la chingada que no se me olvida que me deben -

- ¿De que o que? - Dijo Alfredo haciéndose baboso

- No se hagan pendejos, que no se me olvida que ayer me los chingue bien rico, páguenme lo que me deben -

- La tenias que hacer enojar Ovidio - Dijo Serafín para después darle un zape

- Yo ya te pague ayer - Dijo Alfredo

- No te hagas baboso Alfredo, no me diste nada y eres el que más me debe -

- Bueno pues ¿Cuanto te debemos cada quien? - Me preguntó Vicente, la verdad si me les gane bien y bonito

- Dejen checo - Dije sacando mi teléfono buscándolo en notas porque mujer preparada vale x2 y yo todo pongo en notas - Alfredo me debe $15,000, Serafín $8,000, Ovidio $4,000, Ivan $5,000, Ismael $10,000, Rodrigo $6,000 y Vicente $ 2,000 pero te la perdono por que le dijiste a mi papá que aquí estaba y ya no me regaño -

- ¡Que huevos! - Dijo Alfredo enojado

- ¿Quien los manda a poner de a 500 la carta? babosos, y a no pagarme ayer -

- Gracias princesa por eso eres mi hermana no hermana favorita - Dijo Vicente abrazándome, ayer sólo estábamos jugando nosotros los demás estaban en su pedo y hoy igual también solo estábamos nosotros, Regina se tuvo que ir porque tenía pendientes con sus papás entonces yo era la única mujer como casi siempre, la verdad tampoco entiendo porque a Alejandrina y Grisel no les gusta estar tanto con ellos, bueno también los veían diario en su casa y entendía que ahora tenían novio pero casi siempre fue así, yo sola con ellos.

- Ya hay para que agarren - Dijo Rodrigo. Todos nos sentamos a comer, teníamos tanta hambre que ya ni siquiera hablamos y como no si estoy segura de que ayer no cenaron y estuvimos comiendo puras cochinadas para aguantar y para que no se nos subiera tan rápido la peda.

- Sofia - Me habló Ovidio

- Eu - Dije acercándome a él

- Ten - Me dio el dinero que me debía y le sonreí

- Para que no te agüites mañana te picho una malteada y te hago roles de canela ¿Va? - Me gusta mucho hacer postres es como mi hobbie y se que a Ovidio le encantan los roles de canela que yo hago. El solo soltó una risita y asintió, ya eran las 8:00 p.m y sinceramente yo todavía tenía mucho sueño

- Ey ¿Se van a quedar aquí o se van a ir? -

- ¿Nos estás corriendo? - Pregunte llevando una mano a mi pecho haciéndome la indignada

- No princesa, ¿Como crees? Solo para ver que vamos a hacer - Dijo Vicente justificándose

- Pues yo como quieran - Dijo Ovidio

- Pues a mi también me da igual, mi papá no va a estar y no va a haber nadie en mi casa así que me van a adoptar, no les queda de otra - Dije causando la risa de los mayores