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Tras un rato investigando los datos del portátil Lucía lo cerró de golpe y sopló aire por la nariz con ira acumulada.

—¿Mami?

—Hijos de puta... —farfulló entre dientes alejando sus labios de Dani para que no la oyera.

—¿Qué pasa, Lu?

Preguntó Amelia tomando al pequeño en sus brazos para acunarle viendo su preocupación.

Lucía se apretó el puente de la nariz y se levantó.

—Iré a prepararme, salimos en media hora.

—¿No nos vas a decir qué le han hecho si quiera? —Se quejó Luz.

—Desde luego que no—Tomó el portátil con fuerza. —Ni lo pienses.

Luz resopló con hartazgo y se desplomó en el sofá.

—Idiota.

Lucía le pateó el pie alzando una ceja y besó la cabeza de Dani antes de subir las escaleras para prepar su viaje.

Amelia hizo rebotar a Dani y observó a su novia con el ceño fruncido de preocupación.

—Amelia... —murmuró el niño jugeteando con sus pequeños dedos. —Prométeme que vais a volver a salvo...

La bruja sonrió de lado y le giró para mirarle a los ojos.

—Estaremos bien, enano. Te lo prometo. Estarás bien aquí hasta que volvamos.

Él asintió despacio y se mordió el labio con preocupación.

—Va-vale.

Cuando Lucía volvió, tomó a su hijo y se pasó el rato dándole mimos y jugando con él hasta que Amelia estuvo lista para partir.

—¿Ya nos vamos?

—Tú estás tonta—Respondió Lucía. —No vas a venir, Luz. Olvídalo.

—¡Pero! -

—¡Pero nada!—gritó, haciendo a Luz encogerse un poco asustada. —No hay más que hablar.

—¡No te preocupes tita!—animó Dani gateando hacia ella. —Estarán bien.

Luz le acarició la espalda y mantuvo su mirada en Lucía.

—No me voy a olvidar de esto.

—Lo que diga la princesa—Se burló rodando los ojos. —Nos vemos pronto mi amor—Le sonrió a Dani y se acercó a abrazarle.—Te traeré un juguete nuevo ¿Sí?

—¡Sí!—dijo emocionado besando su mejilla. —Te quiero mami.

Lucía sonrió.

—Te amo mi niño. Vámonos Ames.

Amelia le dio una mirada de tristeza a Luz y revolvió el corto cabello de Dani con cariño antes de enganchar su brazo al de Amelia y salir de la casa.

—¿Qué es lo que has visto? —Le preguntó Amelia a Lucía antes de cruzar el portal ya restaurado gracias al coleccionista.

—He visto que me voy a cargar a medio mundo.

—Que... Poco clara—Golpeó su barbilla con un dedo.

—Los hijos de puta le secuestraron y le vendieron. Ahora, según ese portátil, está de sirviente para uno de los ricos más imbéciles del planeta.

—¿Cómo lo sabes?

—Es el líder de una secta.

Amelia sintió un escalofrío por sus palabras y el cambio de temperatura al cambiar de dimensión.

🌒Luca🌘(Lumelia/ toh) (Español)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora