ㅡCarl…ㅡ murmuró mientras estaba frente a la puerta.Bella estaba tratando de animar a su novio, ya que hace días que sucedió el “accidente” en el que Carl perdió su ojo. Desde ese entonces el chico se mantenía encerrado en su habitación y se negaba a tener contacto con alguien, y a quién más se negaba ver era a Bella, y ella no entendía la razón.
Entonces así iba la situación, todos los días Bella le pedía a Carl que la dejara entrar pero nunca funcionaba, hasta que llegó a un punto en el que ya no sabía si su relación seguía o ya había acabado, cosa que la preocupó e hizo que se sintiera triste.
ㅡCarl… por favor… ya me estoy cansando de esto… sé que no estás pasando por una situación fácil… pero no te puedes aislar así…
Nada, no se inmutaba en decir palabra alguna, provocando que la desesperación de Bella se apoderara más en ella. Hasta que pensó en algo finalmente.
ㅡBien, si eso es lo que quieres…ㅡ sin más preámbulos giró la perilla y abrió la puerta.
La habitación estaba un poco oscura, la chica entró y cerró la puerta, se dió la vuelta y buscó con la mirada a su novio hasta que lo encontró.
Y allí estaba, con un vendaje cubriendo parte de su rostro, recostado, con el ceño fruncido y la mirada fija en uno de sus cómics. La chica estaba a punto de hablar pero notó que Carl había quitado su mirada del cómic y la había puesto en ella.
ㅡVete.
ㅡCarl…
ㅡDije veteㅡ su tono de voz era frío y cortante, cosa que notó la castaña.
ㅡEscúchame…
ㅡ¡Dije que te fueras!ㅡ sin previo aviso el chico se levantó de su cama, abrió la puerta y la empujó fuera de su cuarto ㅡNo te me acerques nunca más. Terminamosㅡ y sin más cerró la puerta de un portazo.
Los ojos de la castaña se cristalizaron y de ellos empezaron a brotar lágrimas, ya se estaba cansando de todo, no tenía paz mental porque la atormentaba el hecho de saber que Carl no estaba bien, pero después de lo que acababa de pasar sintió que no pudo aguantar más y rompió a llorar mientras regresaba a su cuarto.
Después de unas horas estuvo pensando en cómo hacer que Carl cediera, hasta que finalmente una idea llegó a su cabeza.