Capítulo 3: Los monstruos nacen de la mierda

387 50 13
                                    

"¡¿De verdad vas a permitir que pase esta mierda?! ¡Joder, pensé que eras diferente a los otros ángeles, Miguel!"

Lo único que podía hacer en ese momento era gritarle al ángel en quien una vez confié, al que una vez consideré cercano a mí para que pudiera proteger a mi familia. Pero ahora me daba la espalda, no iba a mover un solo dedo para quitarnos a mí y a Eva el castigo divino que Dios nos había dado.

Mis ojos estaban fijos en Miguel que me daba la espalda mientras escondía sus alas como si no mereciera esas alas divinas que una vez mostró con alegría hacia mí.

"Adam... Las acciones que mi padre hace hacia a los demás tiene un propósito en un próximo futuro, si sus acciones es castigarlo por el resto de la eternidad con castigos diferentes se debe cumplir... incluso si eso es ver a mis seres queridos sufrir por las acciones de mi padre"

Sentí un torbellino de ira formándose dentro de mi corazón, quería golpearlo en esa cara suya para satisfacerme un poco por las cosas que nos estaban pasando a mí y a Eva. Pero me abstuve de cualquier acción que pudiera emprender para no empezar a causar más problemas de los que ya tenía.

"¿Y eso también significa castigar a mi amada Eva? ¿La persona que te ve como su maldito tío que siempre la protegerá de todo lo que Dios le vaya a hacer? ¡Mierda, tu maldito hermano es resposanble de todo la mierda que le está sucediendo a Eva!"

Fue entonces cuando reveló sus alas, pero de una manera más discreta mientras miraba hacia el vacío donde mis hijos estaban condenados a un infierno que no merecían.

"Eva... ¿aún me consideras alguien importante en su vida? ¿luego de que me puse del lado de mi padre para expulsarla del paraíso?"

"Por mucho que me duela decirlo, Eva nunca te ha odiado, Miguel"

"... ¿Cómo sé que no me estás mintiendo, Adam?"

"¿Tengo alguna maldita razón para mentir para que Eva no te odie? Mierda, te diría que Eva te odia con toda su alma, para ver tu maldita expresión de dolor, pero si lo hago sé que estaría faltándole el respeto a mi amada Eva"

"... Es muy amable de parte de Eva no guardarme rencor por todo lo que pasó, pero mi respuesta sigue siendo no, Adam. Realmente espero que Eva me perdone por no haber hecho algo para quitarle el castigo que mi padre le ha dado"

Dejé escapar un suspiro de derrota al darme cuenta que no importaba lo que le dijera a Miguel, no importaba cuantas veces le suplicara o cuantas veces lo amenazara, él siempre iba a ser el lamebotas de Dios.

"Puedo aceptar el castigo de Eva si es necesario para verla feliz..."

"La respuesta seguiría siendo no"

"*Suspiro* Eres una mierda como tu hermano y yo... Espero que un día tú también sufras como lo estamos haciendo ambos, aunque sea, tu hermano si merece lo que está sufriendo..."

Pensé que luego de haber insultado a su hermano nuevamente me iba a dar una mirada de muerte o aunque sea intentar sacar un poco de su poder para amenazarme para no hablar sobre lo miserable que era Lucifer, pero lo que me sorprendio fuera el hecho que no había sucedido nada de eso.

"No te preocupes, Adam... también tengo un castigo por no matar a mi hermano menor cuando mi padre me lo ordenó..."

Detuve mis pensamientos al escuchar las palabras que habían salido de la boca de Miguel, fue como si esas palabras hubieran hecho una luz dentro de mis oscuros pensamientos. Pensamiento que pronto se desvaneció cuando mis ojos se dirigieron a Miguel quien seguía mirando al abismo con el rostro abatido.

Las pecadoras siempre estarán en el infierno 【Hotel Hazbin】Donde viven las historias. Descúbrelo ahora