Intercambio de Vecinos

Capítulo 4

-Buenos días.-Dijo JD sonriendo, sin embargo, su expresión cambió a una más seria cuando se dio cuenta que su hermana lo veía con los ojos abiertos sin decir ni una palabra.-Bitty B ¿Estás bien?

Poppy finalmente reaccionó.-Sí, perdón. Me asustaste.

La respuesta pareció relajar al hermano mayor quien nuevamente volvió a poner una sonrisa en su rostro.-Tu desayuno está listo, te preparé avena.

-No tengo hambre, tengo que irme.

-No digas tonterías Branch. Ahora siéntate y come tu desayuno, recuerda que es la comida más importante del día. Además, la avena te ayudará a tener una mejor digestión.

-Eso suena genial, pero ya fui al baño y te recomiendo no usarlo porque te aseguro que por el momento es más peligroso que visitar Chernobyl.-Dijo Poppy sonriendo orgulloso de su inteligente respuesta.

-¿Perdón?-Respondió JD frunciendo el ceño.

-Nada, tienes razón, la avena es muy saludable.

Con una sonrisa fingida, Poppy se sentó en la mesa y tomó una cucharada de avena, sintiendo náuseas rápidamente. Definitivamente prefería comer la comida quemada de Viva.

JD solo le sonrió y luego se fue por un pasillo. Poppy aprovechó la oportunidad para escupir la comida en el plato y limpiarse la lengua con una servilleta.

-Ahora comprendo por qué Branch siempre está de mal humor. Yo también lo estaría si me alimentara tan mal todas las mañanas.

Poppy miró hacia a un lado y se encontró con el plato de comida del gato. Sonriendo, el joven vació el contenido de su plato en el de la mascota y regresó nuevamente a su lugar en la mesa, simulando haber terminado todo su desayuno al escuchar pasos acercarse.

JD regresó nuevamente al comedor, sorprendiéndose al encontrar el plato de comida vacío de su hermana.-¡Vaya! ¡Sí que tenías hambre!

Poppy sonrió satisfecho sabiendo que su plan había funcionado, sin embargo, su rostro cambió a uno de espanto cuando JD volvió a hablar.

-Te voy a servir un poco más, Bitty B. Así tendrás mucha energía el resto del día. Espera aquí sentada.

Poppy dejó escapar un suspiro de derrota cuando JD regresó con un nuevo plato de avena y se sentó a su lado mientras la observaba comer.

-La avena te hará una chica hermosa y fuerte, más de lo que ya eres.-Dijo el hermano mayor sonriéndole.

Después de varias cucharadas, Poppy sintió nuevamente náuseas, por lo que tragó con dificultad ese último bocado y se levantó de la mesa.-Ya me llené, ya no me entra más avena. Nos vemos luego.

JD sujetó gentilmente la muñeca de su hermana para impedir que se marchara.-Branch, no te puedes ir sin antes despedirte apropiadamente.

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M

ientras tanto, en la casa de al lado, Branch miraba el desayuno extremadamente quemado que se encontraba frente a ella. Frunciendo el ceño, volteó a ver a la cocinera.

-¿No tienes avena? ¿O cereal?

Viva miró a su hermano con extrañeza, mientras negaba con la cabeza.

-Lo siento Poppy, no hay, pero puedo buscar recetas de avena en Internet e intentar cocinarla mañana. Quizás hasta me salga mejor que nuestro desayuno habitual.

-¿Qué pasa Poppy? La comida de tu hermana siempre te ha gustado.-Peppy intervino mirando a su hijo con seriedad para hacerle entender que no había que herir los sentimientos de Viva.