Una Chica en ¿¡Un internado de Hombres?!

Capítulo 1

Alex P.O.V:

Mi padre  me había obligado a ir a ese maldito internado de hombres. Claro, como siempre, debo ir con Bella, ella es la que me dice los nombres de las personas que no conozco y mi horario, osea las reuniones que tenga, etc,  y a Jasper, mi guardaespaldas.

Ahora me encontraba encerrada en mi habitación tocando mi guitarra eléctrica y mi padre estaba afuera tocando la puerta y gritando que ya debíamos irnos hacia el aeropuerto o llegaríamos tarde, lo seguí ignorando hasta que mi puerta se abre de golpe dejando ver a Jasper y mi puerta rota.

- Oh, gracias Jasper por romper mi puerta, te lo agradezco mucho- dije con un tono de sarcasmo y enojo.

En eso entra mi padre a mi cuarto, como siempre vestido de traje y sus largos cabellos ordenadamente bien peinados.

- Vamos Al (mi apodo), llegaremos tarde- me dijo y bufé.

Tomé mi mochila y mi iPhone 6 y salí azotando la ya rota puerta.

Caminé por los largos pasillos de la mansión Black hasta llegar al salón de entrada. Luego bajó Jasper con mi padre y Bella y nos subimos a la limusina.

- ¿Emocionada?- preguntó Bella, ella era una perra y no debía hablar hasta que yo se lo indicara, ella pensaba que podía hacer lo que queria ya que una ves se acosto con mi padre, ja ilusa.

- ¿Te dije que podías hablar?- rugí haciendo que diera un pequeño salto en su asiento y negó tímidamente con la cabeza- Bien, entonces cállate- le dije y ella asintió y se dispuso a ver por la ventana todo el viaje.

La limusina la conducía Jasper y en otra iba mi padre con Harry, su guardaespaldas, cuando llegamos al aeropuerto había miles de paparazzis esperando por nosotros, nos bajamos de los autos y los guardias de seguridad nos ayudaron a entrar al lugar.

- Bien Al, quiero que te comportes y seas una buena representante del apellido Black, por las notas no me preocupo porque sé que eres una chica bastante inteligente, como tu padre claro- dijo con arrogancia y reí.

- Bien, adiós papá te extrañaré- dije y el me sonrió y me dio un abrazo.

- Prometo que iré a verte pronto- me dijo y asentí- cuando llegues allá, tendrás tu propio cuarto, claro será como un mini departamento y todas las comodidades que necesites, también halla tendrás a tu disposición a Marcus - dijo y asentí - Bien, te quiero mucho y cualquier cosa llámame ¿si?- me dijo y asentí y lo volví a abrazar cosa que lo sorprendió mucho.

- Adiós papá, te quiero- dije y tomé mis cosas para caminar hacia donde debía abordar mi jet privado.

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Narro yo:

Mientras tanto en el internado de  St.Benedict:

El Prof.Hundert comienza a acomodar su clase de historia, se sienta a admirar que esté a la perfección y al comprobar que todo este tal y como le gusta se va hacia la ceremonia de inicio de año.

- Si se fijan bien en la inscripción que hay debajo del obispo, dice: ''No para uno mismo'', esa frase resume la filosofía del St.Benedict, la sabiduría que se obtiene aquí, debe ser empleada para el bien común, no solo para el beneficio propio y por último Finish, Origine y Pennetta, esas tres palabras las llevan escritas en sus corazones bajo el escudo del St. Benedict,  es el lema de nuestro internado, significa el final depende del principio, el final depende para nosotros del principio, Bienvenidos a un nuevo año escolar alumnos- dijo el director y todos salieron del auditorio corriendo gritando y jugando.

El Prof. Hundert iba caminando, saludando a algunos estudiantes y maestros cuando ve a uno correr por los jardines.

-Perdone- le dijo al muchacho.

- Am, ¿quien yo?- respondió desorientado el chico.

- Si señor, ¿como se llama?- le preguntó serio Hundert.

- Luis- respondió nervioso.

- ¿Solo Louis?- pregunto sorprendido Hundert.

- Luis Massudi señor- respondió el joven mirándolo.

- ¿Luis Massudi, podría definirme la palabra camino?- preguntó Hundert aún serio.

- Am, supongo que se le puede dar varias definiciones- dijo el chico más calmado.

- Una ruta por la que alguien o algo transita ¿podría ser?- le preguntó Hundert dejando un poco su lado serio.

- Si- respondió Luis

En eso Hundert miró hacia la acera y el chico comprendió lo que quería- Lo lamento mucho señor- dijo caminando hacia la acera.

- Siga el mismo camino Señor Massudi- dijo Hundert mirándolo con advertencia.

-Si señor, además es mejor para el césped- dijo Luis rascándose nerviosamente la nuca.

- Es mejor para usted- advirtió Hundert.

Luego se dirigió a su salón mientras conversaba con otro profesor de el inicio de clases hasta llegar a su salón.

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Hola, esta es mi primera novela de este tipo, prometo subir un cap por semana y si les gusta porfa voten y comenten :)

En multimedia el Prof.Hundert