13

842 147 13
                                    

Jungkook mostraba a Taehyung cada trajecito que había traído para Mingyu, aunque este mismo se sentía un poco apenado porque se había emocionado mucho al comprar la ropa para el pequeño

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Jungkook mostraba a Taehyung cada trajecito que había traído para Mingyu, aunque este mismo se sentía un poco apenado porque se había emocionado mucho al comprar la ropa para el pequeño.

Desde zapatitos hasta un perfume, toallitas y hasta 4 paquetes de pañales para que Taehyung no tuviera que ir por más, estaba realmente emocionado por tener que pasar sus días con el Omega y su cachorro.

—Espero que todo te guste y también espero no haberte comprado demasiado —dijo el alfa apenado.

Taehyung miró enternecido al alfa nunca había conocido a un alfa tan atento y preocupado por un Omega como lo era Jungkook, quizás le gustaba engañarse con que era su personalidad normal ya que es futuro doctor pediátrico pero eso solo era la mitad de todo.

—Muchas gracias, Jungkook no solo por esto sino por dejarnos quedar en tu casa, en verdad estoy conmovido porque tú me has ayudado demasiado estos últimos meses y me siento realmente agradecido contigo —dijo tomando entre sus manos la mano del alfa.

—Es lo menos que puedo hacer.

Taehyung lo miró conmovido por la situación, tanto que no pudo evitar soltar un par de lágrimas que fueron rápidamente eliminadas  con los pulgares del alfa que tenía sus mejillas entre sus manos.

Jungkook jamás había visto unos ojos tan bonitos como los de Taehyung, eran demasiado grandes y muy expresivos.

«Lindo, lindo, lindo» era lo único que podía pensar él y su lobo.

—No llores, todo estará bien te lo prometo.

El Omega asintió pues genuinamente confiaba en las palabras del alfa, porque hasta ahora no había hecho más que ayudarlo lo más que pudiera y ahora vivirían juntos.

—Gracias.

Más no recibió respuesta ya que la respuesta del alfa fue acercarse al Omega y dejar un pequeño beso en su mejilla haciendo que sus mejillas se tornaran carmín.

—No agradezcas lo hago con mucho cariño.

—No agradezcas lo hago con mucho cariño

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Omega FailDonde viven las historias. Descúbrelo ahora