Omega Fail

18

Por la madrugada cuando Jungkook despertó pudo ver al bonito Omega dormitar sobre su pecho, es hermoso como sus labios se abultan un poco al estar recargado, como sus largas pestañas pueden tocar sus mejillas.

Sus mejillas se encuentran rojas al aún estar el celo presente, habían quedado cansados después de haber tenido un par de encuentros, se sentía un poco avergonzado porque nunca creyó que algo tan íntimo iba a pasar tan rápido. No iba a decir que no le gustó simplemente es demasiado para su pobre corazón.

El olor de los dos mezclados en la habitación era sumamente encantador, jamás cambiará por nada la sensación de orgullo ante eso. Se sentía un poco cansado, no iba a mentir nunca había asistido a un Omega en celo y le daba vergüenza admitir que Taehyung se llevó sus dos primeras veces, claro que antes quizás tuvo encuentros casuales que no llegaron a penetración por una u otra circunstancia, sin embargo, no se arrepiente de alguna manera haber esperado hasta su destinado.

4:50 am, marca el reloj en el tocador de su habitación aún quedaba mucha noche para dormir, pero debía inyectar el anticonceptivo para evitar que las veces que anudo en el creen algo para lo que aún no están listos por el momento, no le preocupa tanto porque los supresores que le habia dado anteriormente también son anticonceptivos.

Sin embargo, al haber nudo debe haber una inyección o de otra manera la concepción se llevará a cabo. Pero esto es algo que Taehyung tiene que decidir, porque aunque sea lo más correcto debe pedir autorización al Omega para llevar a cabo ese procedimiento.

La piel de Taehyung en sus yemas es tan suave que desea morderla hasta dejar una linda marca en él, le sorprende haber sido lo suficientemente cuerdo para no haberlo marcado, paciencia digna de un alfa puro.

—Eres tan bonito... Aún recuerdo cuando te Vi por primera ves sentado en esa silla en los comedores, tu hermoso cabello esponjado y tus feromonas oliendo apenas con un atisbo de leche materna. Desearía tanto poder oler nuevamente eso de tí, quizás cuando tengamos un cachorrito en el futuro pueda disfrutar eso y Mingyu tendrá con quién jugar —susurro mientras acariciaba su rostro dormido.

—No puedo evitar mirarte y querer todo de tí, tu llanto, tus risas, tus sonrisas, tus alegrías, tus tristezas, todo y es que nada me basta Omega. Perdóname si estoy siendo bastante codicioso pero ya no quiero que estés con alguien más cuando yo puedo ofrecerte el mundo si así lo deseas.

Sus palabras no son escuchadas por Taehyung humano, pero sí por su lobo y estaba más que encantado por sus palabras que sonaban más a una silenciosa promesa de que no iba a permitir que nada malo les pasaría mientras estén con él. Él los cuida.

*Te creemos, alfa* dijo el lobo para si mismo.