KookV| Nadie dijo que el padre era fácil, Taehyung a la mala tuvo que aprender las dificultades de hacer su maternidad solo, en medio de un mar de estrés donde todo lo que le rodeaba parecía solo ir en su contra.
¿Acaso no estoy dando todo de mi? ¿C...
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A la mañana siguiente, Taehyung se levantó un poco más temprano pues quería darle un desayuno a Jungkook como agradecimiento por lo que se paró rápidamente hacia la cocina, si quería sorprenderlo tenía que apurarse.
al llegar a la cocina pudo ver lo amplia que era la alacena donde guardaban todos los insumos, habia todo tipo de condimentos que no sabía ni por donde empezar, así que tomo lo que le pareció más fácil poniéndose manos a la obra. cantaba despacito en lo que cocinaba pues no quería hacer mucho ruido y levantar a su bebé, se sentía tan doméstico que su lobo movió su colita feliz porque estaba haciendo algo lindo para su alfa.
6:00 am
la comida estaba casi lista cuando de pronto escucho unos pasos que se acercaban a la cocina, no se alertó porque lo más seguro era que fuera jungkook, no habia nadie mas en la casa. así que no debía preocuparse.
—¿Taehyungie? —llamó el pelinegro cuando sintió el delicioso olor proveniente de la cocina.
Taehyung volteo a ver dónde provenía la voz viendo a un Jungkook aun dormitado.
—Hola hyung, buenos días—saludo taehyung, enternecido porque el mayor apenas podía abrir los ojos —, me levanté un poco antes porque quería darle algo de desayunar en agradecimiento por recibirme a mí y a mi cachorro.
Jungkook sonrió con el corazón lleno de calidez. —No debiste molestarte, pero acepto tu agradecimiento porque huele delicioso.
El alfa tomó asiento en la isla de la cocina para esperar a que taehyung le ofreciera lo que sea que le hubiera preparado, le parecía un gesto adorable que el omega se hubiera molestado en hacerle el desayuno. Ya que por lo general no desayunaba pues se levantaba, iba al gimnasio y de ahí a la universidad por lo que terminaba comiendo hasta la hora del primer receso o hasta que iba al hospital.
—Listo, desayuna te hará bien —indicó Taehyung con una bonita sonrisa —, iré a ver si Mingyu sigue dormido, ya regreso.
Jungkook asintió gustoso por el olor que tenía la comida, Taehyung era un muy buen Omega, pronto lo invitaría a otra cita pero quizás está vez solo ellos dos.
Al llegar a la habitación, Taehyung notó que su pequeño cachorro seguía dormido con tanta paz y tranquilidad que le conmovió el corazón.
«Demasiado hermoso» pensó antes de acercarse y dejar un beso en su frente.
Al mirar al buró vio que su celular tenía notificaciones, alcanzó a ver qué eran mensajes de su mamá, así que tomo su celular y salió de la habitación para ir a dónde estaba Jungkook.
Observó el mensaje que se alcanzaba a leer de su madre y se sintió temblar cuando no solo su madre había enviado un mensaje, sino que también Hyunsik.
No podían quitarle a su bebé, ¿de que custodia estaba hablando Hyunsik? Esto no le podía estar pasando, ya había sufrido muchas de las consecuencias por haberse embarazado joven y ahora tendría que enfrentar a el alfa que no solo lo abandonó sino que ahora quería venir a su vida como si nada hubiera pasado y ahora sí ser el padre que Mingyu nunca tuvo.
