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"¿Puedo tocarte?" Mantuviste tu mirada fija en la película que se proyectaba al otro lado de la habitación, tus oídos calientes mientras intentabas ignorar a tu necesitado novio. Jake se quejó silenciosamente en tu oído por tu indiferencia, su necesidad por ti crecía cuanto más tiempo lo sacudías con tu mano. Levantó las caderas para empujarse más hacia tu palma, suaves jadeos salieron de sus labios cuando sintió tu mano apretarse alrededor de él. "Por favor, necesito sentirte". Los labios de Jake mordisquearon suavemente tu oreja mientras se empujaba completamente contra ti, tus lentas caricias se detuvieron cuando atrapó tu mano entre sus muslos y tu cadera.
Una vez más apretaste tu mano alrededor de él, apretándolo con una advertencia. Jake siseó de dolor, la parte inferior de su cuerpo se apartó ligeramente de ti en estado de shock. Sin llamar la atención volteaste la cabeza hacia tu novio, su lamentable estado hizo que tu satisfacción se hinchara por tus brazos. Tu nueva piel de gallina no fue nada comparada con la forma en que tu cuerpo reaccionó a sus siguientes acciones, tu cabeza se giró para mirar alrededor de la habitación y comprobar si alguien había notado tu error.
Jake te dió una sonrisa maliciosa y movió su mano hacia arriba en el frente de tu camisa. Él aprovechó tus miradas de advertencia, tomando uno de tus senos con una de sus manos antes de deslizar la otra detrás de tu espalda. Tu mandíbula se apretó cuando sentiste que tu sostén se desabrochaba, siendo sostenido por nada más que la mano de Jake presionando contra ti. "Lo siento, fue un accidente". Jake te guiñó un ojo mientras quitaba la mano de tu camisa, sostenía tu sostén en sus manos mientras se alejaba de ti. "Los demás escucharán". Te rendiste, inclinándote hacia adelante tras él. Jake te permitió inclinarte hacia él, su mano libre se estiró para pasar una de tus piernas sobre las suyas.
"No si estás callada" Bromeó contigo, un lado de su boca se torció en una sonrisa mientras inclinaba su cabeza hacia ti. "Puedes estar callada, ¿no?" Era casi gracioso lo rápido que Jake podía cambiar los rollos, controlándote con la palma de su mano mientras te empujaba a un espacio mental sumiso. Asentiste con confianza hacia él, tu certeza se desvaneció en el momento en que sus dedos rodearon tu rodilla. "No queremos que nadie vea lo sucia que puede estar mi chica, eso es sólo para mis ojos". A través de la habitación en penumbra era casi imposible ver las manos de Jake, el reflejo de la luz en sus anillos era la única prueba de que sus manos tocaban tu piel.
"Pero parece que es demasiado tarde para eso, ¿eh?" Jake te susurró al oído, sus dedos alcanzaron tu ropa interior mientras miraba un punto frente a ti. "Heeseung parece estar realmente disfrutando esto, su pobre manta de excusa no está haciendo nada para ocultarlo". Dice y tú seguías congelada en el lugar, con las piernas abiertas debajo de la manta mientras los dedos de tu novio trazaban formas en círculos contra la parte superior de tu muslo. "Mi lindo bebé hace los sonidos más bonitos, ¿deberíamos mostrárselo?" Jake empujó tu ropa interior hacia un lado, colocando sus dedos entre ti mientras sus yemas se deslizaban por tu parte más sensible. Tu cabeza cayó mientras él empujaba sus dedos dentro de ti, su pulgar se frotaba contra ti mientras movía lentamente su muñeca.
Después de un largo minuto de ocultar tus sonidos, accidentalmente ahogaste un gemido silencioso y tus labios mordidos cayeron ante un empujón más fuerte. "También podrías darles un espectáculo a todos, dejar que te escuchen". Jake usó su otra mano para agarrar tu mandíbula, girando tu cabeza hacia los tres hombres sentados en el sofá a tu lado. "Dejame escucharte." Un gemido estrangulado salió de tus labios ante la vista desordenada que te saludó. Tres pares de ojos estaban pegados a la manta sobre tus piernas, sin hacer nada para ocultar los movimientos que ocurrían debajo de ella. Si era posible, te volviste aún más tímido cuando los tres hombres volvieron sus ojos hacia tu cara.
Se podía ver a Sunghoon acomodándose en su asiento, con las piernas abiertas mientras se arreglaba los pantalones. Intentó actuar como si nunca los hubiera visto a los dos, girando su cabeza hacia la película olvidada que se estaba reproduciendo. Si no fuera por el fuerte trago que siguió, casi podría haber engañado a un ciego. "Malditos pervertidos" Jake soltó una carcajada, su mano se aceleró cuando finalmente quitó la manta que te ocultaba de los demás. "Mierda", la mandíbula de Jay cayó, sus ojos mirando tu piel mientras sus ojos vagaban por toda tu mitad inferior. . Una exhalación forzada salió de sus labios al ver la parte interna de tus muslos. Una mezcla de rojo y morado pintó tu piel, y varios chupetones se esparcieron por la franja de piel que estaba oculta por tu falda levantada.
"Tienes unas bragas muy bonitas, pero creo que apreciarían más la vista si te deshicieras de ellas". Jake sopló aire frío en tu oído y su mano libre presionó la parte inferior de tu estómago. “¿Muéstrales lo bonita que eres para mí?” Y tu lo hiciste.
