(Papufresco)
Miguel y Luis han sido amigos desde que tienen memoria. Al ser los príncipes de pueblos vecinos les resultaba muy fácil verse durante su niñez y adolescencia.
Pronto, ambos cumplirán 20 y eso significa que deben buscar alianzas y casars...
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Miguel y yo hemos sido amigos desde que tengo memoria, y creo que nunca he estado tan feliz con alguien como lo soy con él. Es una persona maravillosa, tan divertido y travieso que me hacía meterme en problemas; pero a pesar de eso, siempre me protegía, y más importante... me hacía sentir vivo.
Una de esas veces en específico me hizo darme cuenta de lo mucho que me dolería si se iba...
Un Miguel de 6 años corría por el patio del castillo del más bajito de ellos, en ese tiempo: Luis. Iba con una espada de madera y una capa de sabana. Luis lo miraba expectante, sentadito en el pasto comiendo galletas y té que les había traído la moza personal del castaño.
El de ojos dispares explicaba súper emocionado las hazañas que imaginaba tener más grande mientras empalaba la espada en el aire, simulando ataques.
"Y entonces podré volver para seguir jugando solo contigo Luis, ¡te lo prometo!" Sonrió y el hueco del diente que se le había caído hace unos días hizo aparición.
"¿Conmigo? ¿Por qué solo conmigo?" Se levantó apoyándose en sus manitas para no caer y le llevó una galleta a Miguel.
"¡Pues porque eres mi mejor amigo, enano!" Tomó la galleta con gusto y abrazó al pequeño.
Sonreí al recordarlo mientras me acercaba al balcón esperando ver al caballo de Miki aparecer por la entrada en cualquier momento. Me envió una carta hace unos días y dijo que volvería pronto de su primera misión. Ya quiero que me lo cuente todo...
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Han pasado al rededor de 6 horas y yo sigo dando vueltas por el gran salón, viendo los muros, analizando cada pintura por vigésima vez, parando de vez en cuando en mi favorita, una que nos hicieron a Miguel y a mi juntos, comiendo estofado de pato por primera vez, el que lo pintó pudo captar toda la escencia de mi amigo de manera increíble. Pero incluso con la magnificencia de aquel bello cuadro, yo me aburría.
