Capítulo 1: Día de película

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Marry y sus amigos se encontraban en Cielo Estelar, tecleando en sus computadoras. Tras lo ocurrido con Charmcaster, el director los castigó teniendo que hacer trabajos extracurriculares, a cambio de no ser expulsados.

K-y y Greeg se veían cansados, con evidentes ojeras, que reflejaba cansancio y sueño no conciliado.

-No puedo más... mi cerebro va a explotar...- dijo Greeg cansado.

-Esto se está volviendo aburrido, viejo- dijo K-y, dejándose recargar más en su silla – Seré un anciano antes de terminar...

Anfibia, quien estaba fresca como lechuga, mirando a los dos chicos les dijo:

-Oh vamos muchachos, solo faltan 15 trabajos de investigación y experimentación para poder acabar.

-Dilo por ti, cabeza de melón- dijo molesto el kineceleran- no todos disfrutamos los estudios.

Marry, quien estaba igual que los muchachos, cansada y con evidentes ojeras, dijo:

-Pero aun así... es algo que debemos hacer... nos guste o no...- dio un bostezo antes de tomar un café que tenía al lado.

La chica dio un suspiró, miró al kineceleran y dijo:

-Lamento que tengas que hacer todo esto...

-No te preocupes nena, nosotros fuimos los que decidimos acompañarte en esta locura, además, es mejor esto que ser expulsados- respondió el alíen veloz igualmente tomando un café.

El splixson dejo caer su cara en la computadora, luego preguntó:

-¿Podemos tomar un descanso, chicos?

-¿Qué tal si vemos una película? - sugirió la morena al grupo.

-Es una gran idea, nena- dijo el alíen veloz poniéndose de pie.

-Marry, estamos haciendo trabajo extracurricular, no hay tiempo para escabullirnos al cine– dijo la galvan algo confundida, ya que a ella no le molestaba tener que hacer las tareas.

-Vamos Anfibia- dijo K-y poniendo una garra en su hombro-, solo vamos a ver una película, no seas aguafiestas.

-¿Sabes que estamos castigados verdad?- dijo la alíen rana quitando la garra de su compañero de su hombro.

-Vamos Anfibia, un descanso no caería mal, luego de no dormir por días- dijo la humana a la galvan.

-Vamos Anfibia, vamos al cine- dijo Greeg insistentemente.

-Además, el cerebro también necesita descansar de vez en cuando - agregó la morena.

La alíen rana suspiró, y ya algo derrotada dijo:

-Agrr está bien, vamos a ver una película.

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Mientras tanto, Hook junto con Pixiz se encontraban investigando un robo y asesinato de dos camaradas suyos, junto a más plomeros. Había varias cintas policiales alrededor, mientras alejaban a los civiles de la zona, para que no contaminaran la escena del crimen.

Delante de ellos se encontraba una nave de carga, cuyo motor recibió grandes daños por la explosión de una bomba, además de que la puerta del cargamento estaba abierta y con una marca de garra en la parte del seguro. No era lo único que había en la escena del crimen, también había un camino de sangre que se dirigía al bosque, cuyo cadáver no estaba muy lejos a unos 5 metros de largo, y otro cuerpo que se encontraba en medio camino, además de que tenía un agujero en la cabeza.

-Esto se ve muy mal- dijo el petrosapien acercándose a uno de los cadáveres.

-Puedo entenderlo de Riku, era un novato, ¿pero de Jixer?- pensó un poco la hada.

Heir 4: Libro 3Donde viven las historias. Descúbrelo ahora