10. Nuevos desafíos en el horizonte

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La vida de Jungkook y Jimin transcurría apaciblemente, aderezada por la música, las risas y la complicidad que solo el amor verdadero puede brindar. Sin embargo, un nuevo obstáculo se interponía en su camino: la distancia.

Jungkook había recibido la oportunidad de estudiar música en una prestigiosa academia en otra ciudad, una oportunidad que no podía dejar pasar. Jimin, por su parte, debía quedarse en su pueblo natal para terminar sus estudios y cuidar de su familia.

La noticia cayó como un balde de agua fría sobre ellos. La alegría por el futuro de Jungkook se mezclaba con la tristeza de la separación.

Una noche, bajo la luz tenue de la luna, se sentaron en su lugar favorito junto al río.

(Con voz temblorosa) ~ ¿Y ahora qué? ¿Cómo vamos a hacer esto?. Pregunto un timido Jimin

(Tomando la mano de Jimin) ~ No será fácil, lo sé. Pero tenemos que encontrar la manera de que esto funcione.

(Suspirando) ~ No quiero perderte, Jungkook. Te amo demasiado.

(Mirándolo a los ojos) ~ Yo también te amo, Jimin. Más que a nada en el mundo. Y siempre te amaré, sin importar la distancia.

(Llorando) ~ Pero es tan difícil pensar en estar separados.

(Enjugando las lágrimas de Jimin) ~Lo sé, mi amor. Pero la distancia no tiene que ser un obstáculo. Podemos mantener viva nuestra relación con llamadas, videollamadas y cartas. Y cada vez que nos reunamos será aún más especial.

(Tratando de calmarse) ~ Tienes razón. Tenemos que ser fuertes y confiar el uno en el otro.

~  Lo haremos, Jimin. Juntos podemos superar cualquier cosa. (Abrazándolo con fuerza)

A pesar de las palabras de aliento, la incertidumbre y la tristeza aún nublaban sus corazones. La idea de no verse cada día, de no compartir risas y abrazos, era desgarradora.

En los días siguientes, intentaron aprovechar al máximo el tiempo que les quedaba. Salían a pasear, iban al cine, tocaban música juntos y simplemente disfrutaban de la compañía del otro.

Un día, mientras Jungkook empacaba sus maletas, Jimin le entregó una pequeña caja.

(Curioso) ¿Qué es esto?.  Pregunto Jungkook confundido 

(Sonrojado) ~ Ábrelo. Le respondió Jimin. 

Jungkook abrió la caja y encontró un hermoso collar con un colgante en forma de corazón partido. En una de las mitades del corazón estaba grabado su nombre, y en la otra, el de Jimin.

(Conmovido) ~ Es precioso, Jimin. Gracias.

(Sonriendo) ~  Quería que tuvieras algo que te recordara a mí cada vez que me mires.

(Colocándose el collar) ~  Siempre lo llevaré puesto, mi amor.

Se abrazaron con fuerza, sintiendo que el collar era un símbolo de su amor inquebrantable.

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Llegó el día de la despedida. Las lágrimas brotaban de sus ojos mientras se miraban por última vez.

(Con voz entrecortada) ~  Te amo, Jimin. No me olvides.

(Llorando) ~ Te amo más, Jungkook. Te espero con los brazos abiertos.

Jungkook se subió al tren, dejando atrás a Jimin y una parte de su corazón.

En los meses siguientes, Jungkook  y Jimin se mantuvieron en contacto a través de llamadas, videollamadas y cartas. Compartían sus alegrías, sus tristezas y sus sueños. La distancia no apagó su amor, sino que lo fortaleció.

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Un año después

Jungkook regresó a su pueblo natal. Jimin lo recibió en la estación con un ramo de flores y una sonrisa radiante.

(Abrazándolo con fuerza) ¡Te he extrañado tanto!

(Besándolo) Yo también te he extrañado, mi amor.

Se miraron a los ojos, sintiendo que su amor era más fuerte que nunca.

Habían superado la distancia y la presión social, demostrando que el amor verdadero puede vencer cualquier obstáculo.

|El rey del Cole y el Novato| #kookminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora