invitation

327 32 4
                                    

Charles

Habían pasado un rato en el que todos habían estado hablando, hasta que llegó el momento de irse, cosa que Charles agradecía había demasiada tensión entre él y Carlos, evitaban verse pero era imposible, así que el estaba aliviado de irse.

Por supuesto que no.

Ya estaban fuera del restaurante mientras esperaban a sus chóferes... Bueno, solo los modelos.
Todos platicaban tranquilamente mientras reían sobre una que otra cosa, y algunos evitaban verse pero terminaban chocando miradas, cosa que hizo sentir mal tercio a uno que otro de los que estaban ahí, pero también sonreían sabiendo que podrían molestar a esos amigos por eso.

- Por cierto - mencionó el japonés obteniendo la atención de todos - Habrá una fiesta por parte de la compañía, ustedes vendrán, ¿cierto? - les dijo a los modelos especialmente

- Hasta la pregunta ofende - dijo el australiano poniendo su mano en su pecho de forma indignada haciendo reír a todos

- Obvio iremos - dijo el moreno con una sonrisa

- Pero, ¿esa fiesta no será en Miami? - dijo el estadaunidense

- Si, de hecho será ahí - habló él de pecas con una sonrisa obteniendo la mirada de alguien de ojos azules

- Genial, amo Miami - habló él español menor

- Quién no ama Miami - habló él español mayor

- Pero bueno chicos, yo ya me voy - habló él monegasco porfin

- Cuídate, Char - le dijo el de pecas con una sonrisa

- Igual tu Chequito - le dió una sonrisa

- Adiós Charlie - le dijo el pelinegro con una sonrisa

- Adiós - le dijeron todos al mismo tiempo

- Cuídate, Charles - le dijo el español menor mirándolo

- Si, tu igual - le dijo evitando verlo - Bueno, vámonos George - le dijo al rubio que miraba al moreno atentamente - George - volvió a hablarle

-¿Qué pasa? - lo miró nervioso

- Vámonos

- ¿Qué? - habló confundido y el monegasco rodo los ojos

- Ya nos vamos, cuidense todos - dijo el monegasco jalando a su amigo del brazo quien se despidió con la mano mientras los demás reían

- Limpiate, se te cae la baba - le dijo una vez que estuvieron lejos de todos

- Ay que - se soltó del agarre del monegasco y puso su mano en sus labios dándose cuenta que le había mentido - Mentiroso - dijo cruzándose de brazos

- ¿Porque mandaste a Carlos a buscarme? - dijo y el otro se quedó helado

- Este... - sonrió nervioso

- George, sólo hiciste las cosas incómodas - se quejó con su amigo

- De hecho creo que te hice las cosas más fáciles, Cha - dijo mirándolo y el monegasco abrió levemente su boca en señal de que diría algo pero volvió a cerrarla

- Sabes que tengo razón - habló de nuevo el rubio

- Y no sabes cuánto odio que la tengas - lo miró mientras caminaba

- Creó que el es realmente bueno para ti, Cha - le dijo - Y se que tú también sabes que él es bueno para ti

- Lo se con todo mi corazón, se que él es él indicado - admitió

El fotógrafo Leclerc Donde viven las historias. Descúbrelo ahora