Capítulo 1. Anomalía

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Era una noche igual de estresante que el resto, desde que Miguel había perdido a su hija en ese maldito momento en el que su universo se desvaneció, no hacía mucho, él no dejaba de asegurarse que el resto de los universos a su alrededor tuvieran sus eventos canónicos y su historia respectiva fluyera con suma tranquilidad y en orden, dicho trago amargo se llevó aquella actitud sarcástica y aligerada del líder, convirtiéndolo en un hombre algo retraído, amargado y sumamente estresado.

Pero, de igual forma, aquella última visión que tuvo segundos después de haber visto a su hija morir no lo dejó en paz y buscaba la manera de encontrar a aquel ser que se la llevó de su lado sin piedad o empatía alguna.

O bueno, esto ante sus ojos.

En cierto punto, esto le pareció algo ridículo, para ser realistas, era algo muy improbable y fantasioso que La Muerte existiera como un ser físico, con la típica guadaña y forma esqueletal, o algo similar a esto, una mujer delgada que traía la perdición a aquellos desdichados que estaban destinados a dejar este mundo.

Como sea, esos mismos ojos que analizaban las numerosas pantallas que mostraban los distintos universos al mismo tiempo, centenares de cámaras de vigilancia que mantenían informado al hombre de todo lo que sucedía en esos instantes, tanto mostrando personas en su día a día, como mostrando a otros Spider-Men o Spider-Women hacer sus respectivas misiones o tareas para mantener el multiverso en balance.

En un momento de descuido, mientras sus ojos irritados y cansados por mantenerse viendo estas pantallas y por no haber dormido por quién sabe cuántas noches, LYLA, su inteligencia artificial, le informó de una anomalía algo peculiar.

Sus ojos se abrieron con sorpresa al notar que una persona, anomalía o lo que carajos fuera esa cosa, se estaba transportando de universo en universo de forma inhumanamente rápida y en viajes totalmente al azar, manteniéndose no más de 10 o 15 minutos en un universo y luego viajando a otro y a otro sin parar, esto en menos de 30 minutos, lo cual era incluso imposible para una simple anomalía de rutina, además de que esta cosa tenía una energía demasiado fuerte como para ser un villano normal.

Miguel frunció el ceño en extrañeza mientras miraba esa anomalía, que en su pantalla era representada como un punto rojo brincando de un lado a otro.

Pero en algún punto, siempre esa anomalía desaparecía del mapa en un momento, al parecer, al azar, era como si simplemente se desvaneciera del plano, para después, las siguientes noches, esta misma volviese a aparecer y que, con el tiempo, esta parecía ser más rápida y más impredecible.

Esto era algo preocupante, una anomalía así era un gran riesgo para el canon y, por consecuencia, al multiverso y Miguel desconocía completamente de lo que esta fuera capaz y no pensaba arriesgarse más, no, definitivamente tenía que llegar al fondo de esto, a pesar de que esto le tomaría tiempo para poder predecir el movimiento del ser y poder capturarlo antes de que fuera demasiado tarde.

Pasaron dos años de esto, Miguel vigilaba esta cosa de forma incesante, LYLA realizaba y programaba algoritmos para poder predecir el siguiente movimiento de la anomalía, pero esta se transportaba de forma consciente, al azar y permanecía en ciertos lugares para después viajar de nuevo, pero el tiempo no era suficiente como para poder atraparla.

Para este punto, Miguel pudo, en una ocasión, capturar una foto, algo movida, sí, de lo que era la anomalía y al verla su corazón dio un vuelco y esa sensación ardorosa de dolor y odio combinados, se hizo fuerte en un chasquido.

Esta anomalía, no era cualquier anomalía, no, claro que no, esta era la responsable de llevarse a su hija... La Muerte, era el mismo atuendo, la guadaña y, bueno, muchas malas lenguas decían que la muerte era una mujer y esta era una mujer delgada, pálida y sus ojos eran vacíos, sin un ápice de emoción, además de que pudo saber que tenía un poder demasiado oscuro como para ser tomado a la ligera.

It was you... (Miguel O'Hara x OC)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora