Prólogo 2

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El cuervo

Pasaron dos años de dicho juicio inicial de la pequeña guardiana de los humanos, Muerte no le vio caso entrenarla desde ese momento porque ella era muy pequeña como para comprender lo que estaba sucediendo a su alrededor, por lo que solamente se dedicó a cuidarla, criarla y protegerla en este tiempo.

Pero, bueno, Lucifer tarde o temprano se enteró del plan secreto entre Dios, Muerte y la pequeña que era prácticamente la nueva princesa del Limbo, fue entonces que, ni tardo ni perezoso, Lucifer envió a uno de sus hijos menores a vigilar a la bebé.

Un joven infante, con un rostro de ángel, cabellos negros azabache con ciertos mechones blancos como la nieve, ojos celestes pálido, era uno de sus príncipes, una cría de este regidor, un demonio de alto rango que era inmortal.

Como sea, los demonios tenían demasiado acceso al Limbo porque era un plano intermedio, por lo que no hubo problema alguno cuando este chico entró a la dimensión del Dios Oscuro mientras este recogía almas por todo el multiverso.

Pero las cosas a veces no salen como uno desea.

Lucifer no contó con que el niño, cuyo nombre era Haziel, se encariñaría con la nena cuatro años menor que él, ocasionando que el demonio infante frecuentara el plano de la menor con tal de jugar con ella, divertirse y cuidarla mientras el "padre" de esta no estaba.

Lucifer no contó con que el niño, cuyo nombre era Haziel, se encariñaría con la nena cuatro años menor que él, ocasionando que el demonio infante frecuentara el plano de la menor con tal de jugar con ella, divertirse y cuidarla mientras el "padre"...

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Aunque, para ser honestos, Muerte se había dado cuenta de la existencia de Haziel. Como todo padre preocupado por su hija, no le agradó mucho la idea de su compañía, pero tampoco podía hacer algo para evitarlo, ya que, si le decía al niño que dejara en paz a la bebé Astre, este vendría con más insistencia y, de igual forma, el niño era inmortal, por lo que lo dejó pasar, más porque no parecía querer dañar a la bebé.

Como sea, los años pasaron, la niña tomó sentido de conciencia a la edad de 3 años, por lo que, una vez que pasó esto, las actitudes de Muerte hacia ella ya eran mucho más estrictas. Muerte ya no la mimaba ni le daba cariño, de igual forma no la dejaba llorar, de lo contrario, ella recibía un castigo severo, no físico por el momento, pero sí emocional.

Esto con el motivo de poder hacer de ella un ser insensible una vez ella fuera mayor.

Obviamente esto iba a tomar demasiado tiempo y trabajo, más aún si cierto demonio no la dejaba en paz, por lo que Muerte se volvía cada vez más frío con la niña, logrando, como consecuencia, que Astre tomara estas acciones como ejemplo a seguir y que su actitud se forjara cada vez menos emocional, aunque con Haziel ella era más accesible, pero su actitud estoica y fría como la de su padre permanecía.

A la edad de 6 años, Muerte la comenzó a entrenar de forma más ardua y con distintos estilos de pelea, porque, si bien, solamente tenía que usar sus poderes mortales con los demonios, tenía que ser muy ágil y rápida al pelear.

Haziel, por su parte, también fue entrenado para pelear y usar sus poderes demoníacos, ya que era necesario para un príncipe de su rango conocer el uso de estos.

It was you... (Miguel O'Hara x OC)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora